MADRID, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Bloqueando la actividad de la hormona progesterona se puede retrasar la progresión de la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth, según un estudio desarrollado por científicos del Instituto Max Planck de Medicina Experimental de Gottingen (Alemania), publicado en la última edición de la revista Nature Medicine. La enfermedad de Charcot-Marie-Tooth (CMT) es una afección degenerativa hereditaria que causa desgaste muscular y otros síntomas neurológicos.
El tipo más común de esta enfermedad, CMT-1A se debe a una actividad excesiva del gen Pmp22, regulada por la progesterona. Los autores del nuevo trabajo testaron el bloqueador de la progesterona onapristona, en un modelo de ratones con CMT-1A y observaron que la onapristona, pese a que no curaba la enfermedad, reducía la expresión del gen que la causaba, mejorando la actividad motriz, frenando el daño en los nervios y reduciendo la gravedad de la enfermedad en las ratas modelo.
Los investigadores señalan que, después de una serie de investigaciones futuras, se podrían emplear tanto la onapristona como otras antiprogestinas en el tratamiento de la enfermedad de CMT.