MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
Tomar medicamentos para reducir la presión sanguínea, en particular diuréticos, podría estar asociado con un riesgo de desarrollar Alzheimer hasta un 70 por ciento menor entre los mayores, según un estudio de la empresa 'Khachaturian and Associates' con sede en Potomac (Estados Unidos) que se publica en la edición digital de la revista 'Archives of Neurology'.
Los científicos examinaron la asociación entre los medicamentos antihipertensivos y la incidencia de la enfermedad de Alzheimer en 3.297 personas que tenían 65 años o más. Entre los años 1995 y 1997, se realizó a los participantes una entrevista inicial y una evaluación que incluyó un análisis en relación a una posible demencia y un inventario detallado de todos los fármacos que tomaban. Aquellos que tenían enfermedad de Alzheimer fueron descartados y el resto participó en evaluaciones de seguimiento cada tres años a partir de 1998.
De los participantes, 1.507 utilizaban fármacos antihipertensivos y 1.790 no. En el segundo examen, 104 participantes habían desarrollado Alzheimer. Los individuos más mayores que estaban utilizando fármaco antihipertensivos al inicio del estudio fueron menos propensos a desarrollar la enfermedad que aquellos que no los tomaban. Esta relación se mantuvo a pesar de que los investigadores tuvieron en cuenta otros factores como el género, edad, colesterol alto, diabetes y riesgo genético.
Cuando los científicos desglosaron los antihipertensivos por tipos, los diuréticos fueron los que mostraron una mayor asociación con la baja incidencia del Alzheimer. En concreto, los diuréticos que contenían componentes adicionales para mantener los niveles de potasio en el organismo, estaban relacionados con más de un 70 por ciento de reducción en el riesgo de Alzheimer.
Los autores señalan que el aumento de potasio en la sangre asociado con los medicamentos podría ser un factor en la reducción de la enfermedad, ya que son resultados que se corresponden con observaciones sobre niveles bajos de potasio asociados con el estrés oxidativo, la inflamación la acumulación plaquetaria y la vasoconstricción, todos posibles factores que contribuyen al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.
Los investigadores sugieren que estos descubrimientos podrían dar lugar a más estudios epidemiológicos y de investigación básica sobre los posibles efectos neuroprotectores de estos fármacos.
