ESA
MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La misión ExoMars de la Agencia Espacial Europea (ESA), en colaboración con la agencia espacial rusa Roscosmos, ha entrado en la última fase de construcción con la firma de un contrato con Thales Alenia Space. El primer vuelo de este proyecto, que estudiará Marte de cara a la futura visita del hombre, está previsto para 2016.
El principal objetivo de ExoMars es dar respuesta a una de las preguntas científicas más escuchadas en las últimas décadas: ¿Ha existido la vida en Marte? Además, desarrollará nuevas capacidades técnicas europeas en el aterrizaje, el vagar, la perforación y la preparación de muestras. Todas estas actividades permitirán conocer si el hombre podrá pisar algún día el planeta rojo, con retorno.
La primera misión se pondrá en marcha en el año 2016, e incluirá el Orbitador de gases traza (TGO) para buscar evidencia de metano y otros gases atmosféricos que podrían ser signos de procesos biológicos o geológicos activos. También se entregará el módulo Demostrador entrada, descenso y aterrizaje (EDM) a la superficie de Marte, para demostrar las tecnologías clave necesarias para las 2.018 misiones y futuras misiones de aterrizaje.
Pero la ESA también tiene ya en mente una misión para 2018. En esta ocasión, aterrizará un Rover en Marte. Será el primer vehículo con capacidad de perforación a profundidades de 2 metros para recoger muestras que han sido protegidas de las condiciones duras en la superficie, donde la radiación y oxidantes pueden destruir materiales orgánicos.
El acuerdo firmado este martes "marca un hito importante para la misión", ha explicado el director de Ciencia y Robótica de la ESA, Álvaro Giménez. "La adjudicación de este contrato da continuidad a la labor de los miembros del equipo industrial de Thales Alenia Space en esta compleja misión, y se asegurará de que sigue en camino para su lanzamiento en enero de 2016", ha apuntado.
Para la misión de 2016, Thales Alenia Space Italia está construyendo el EDM, que actualmente está terminando las pruebas estructurales en los laboratorios de la compañía en Turín, según ha informado la compañía, además del Orbitador de TGO que se está construyendo en la sede de Thales Alenia Space en Cannes (Francia).