MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
Aproximadamente el 22% del elemento xenón encontrado en la atmósfera de la Tierra puede haber venido de cometas, lo que arroja luz sobre un misterio de décadas sobre su origen.
El xenón es el gas noble estable más pesado. Tiene nueve isótopos diferentes (esencialmente 'pesos'), que los científicos pueden rastrear a través del cosmos y usar para determinar sus orígenes. Sin embargo, los modelos de origen del xenón en la Tierra requieren una fuente desconocida adicional que no ha sido identificada durante décadas.
Entre el 14 y el 31 de mayo de 2016, una importante pista sobre una fuente de xenón fue descubierta en datos recopilados por la nave espacial Rosetta de la ESA, en sus órbitas a baja altura alrededor del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.
Según un comunicado de la ESA, al analizar los datos de espectrometría, el investigador Bernard Marty y compañeros encontraron que el xenón que goteaba del cometa 67P parecía haber quedado atrapado dentro del hielo cometario desde antes de la formación del Sistema Solar. Es más, la firma isotópica de este xenón cometario reflejaba muy de cerca la firma del xenón en la Tierra que derivaba de una fuente previamente desconocida.
En cualquier caso, los autores discuten otras posibilidades sobre cómo la misteriosa firma isotópica del xenón llegó a parar a la Tierra, pero finalmente las descartaron. En su lugar, proponen que una porción sustancial de xenón atmosférico en la Tierra, de aproximadamente el 22%, fue entregado por los cometas.