La Antártida continuará resquebrajándose durante dos ó tres semanas más y ya flota en el mar el 25% de la zona cuarteada

Reuters
Actualizado: miércoles, 18 febrero 2009 19:35

MADRID, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Península Antártica continuará resquebrajándose durante dos ó tres semanas más y ya flota en el mar cerca del 25 por ciento de la zona cuarteada de Wilkins, según confirmó hoy a Europa Press desde el buque Hespérides el investigador del Consejo Superior de Investigaciones (CSIC) y coordinador del proyecto ATOS, Carlos Duarte.

"Más o menos se calcula que la superficie de la placa que ya ha empezado a navegar por el Mar de Belinghausen representa probablemente 1/4 parte de la extensión total y al menos durante las próximas dos ó tres semanas aumentará la proporción de la placa Wilkins que se desprende de la placa central y que se dispersa hacia el mar", explicó Duarte, al tiempo que puntualizó que la plataforma de hielo situada en el Polo Sur comenzó a cuartearse hace un año.

El experto señaló que en la actualidad la Antártida se encuentra al final del verano Austral, (ahora mismo en la Antártida es como si fuera el 15 de agosto) y que con el comienzo del invierno austral posiblemente el proceso se detenga y habrá que ver cómo evolucionan las placas de hielo el próximo verano austral, que comenzará alrededor de diciembre.

Además, Duarte apuntó que todo dependerá de si las condiciones vuelven a ser tan cálidas como lo han sido en este verano austral, que ha sido "realmente cálido" en todo el Hemisferio Sur. Igualmente, comentó que la parte externa de Wilkins es la que se ha empezado a desprender, ya que hasta este momento estaba cerrada por la banquisa, que ya se ha fundido.

Concretamente, desde el pasado domingo un equipo de investigadores del CSIC se encuentra analizando el impacto en el ecosistema del Mar de Belinghausen (Península Antártica) del desprendimiento de un sector de 14.000 kilómetros cuadrados de la plataforma de hielo Wilkins, que se ha fragmentado como consecuencia del calentamiento global.

Principalmente, el experto indicó que el cambio climático es el máximo responsable de este deshielo de la placa. "Se empezó a agrietar el año pasado y este año ya estaba en riesgo de desprenderse completamente y dispersarse por el calentamiento climático", indicó Duarte.

REPERCUSIONES NEGATIVAS PARA EL PLANETA

En este sentido, apuntó a resultados recientes que precisan que la tasa de calentamiento en la Antártida se habría subestimado y que la Península Antártica, donde se encuentra la placa Wilkins, es una de las zonas del planeta que más rápido se está calentando. Además, recogen que toda la mitad occidental del Continente Antártico se está calentando rápidamente, lo que lleva al desprendimiento de estas placas y también a la pérdida de masa de hielo en todo el territorio, que tiene consecuencias "importantes" para todo el planeta.

Concretamente, a escala global las repercusiones son "negativas", según Duarte, porque la pérdida de superficie de hielo contribuye a aumentar la radiación que absorbe la Tierra, "mientras que el hielo la refleja hacia el espacio, el océano que queda después de que el hielo se funda absorbe esta radiación y contribuye al aumento del calentamiento", indicó.

Asimismo, explicó en cuanto a la posible fusión de las placas de hielo, que éstas están varadas en Tierra y que por tanto, no contribuyen al aumento del nivel del mar, pero que se desprenderán y se fundirán de manera que aumentará el nivel del mar a escala global.

En cambio, Duarte consideró que a nivel local el impacto es "positivo" ya que ha dado lugar a un fuerte aumento de la producción biológica, a un rápido crecimiento de la biomasa de plancton que ha conllevado una captura local de CO2 atmosférico y que ha congregado gran abundancia de fauna como focas y ballenas.