VALENCIA 1 May. (EUROPA PRESS) -
La sección primera de la Audiencia de Valencia ha condenado a un año de cárcel a una pareja de nacionalidad camerunesa, un hombre de 34 años, Mouchili M., y una mujer de 26, Fakkam R., por estafar a un hombre en Valencia con el timo de los 'billetes manchados' o 'nigerianos'. Los acusados se habían mostrado de acuerdo con acusación particular y ministerio fiscal, que incluía una indemnización para la persona estafada de 10.000 euros.
Asimismo, en ejecución de sentencia y antes de resolver sobre la ejecución de la pena, se tendrá que resolver en relación con la procedencia de aplicar la medida de expulsión del territorio nacional por 10 años sustitutiva de la cárcel.
Según considera probado la sentencia, ambos acusados se pudieron de acuerdo con otra persona no identificada para cometer estafas mediante el procedimiento conocido como timo 'de los billetes nigerianos' o 'manchados'. Para ello, en mayo de 2005, la persona no identificada se presentó como cliente en una tienda de Valencia donde expuso al dueño que había recibido una herencia en Suiza y tenía dificultades para sacarla de se país al ser mucho dinero.
Esta persona le dijo que había encontrado una forma para hacerlo que consistía en pintar los billetes con un tinte especial para traerlos a España como si fueran blancos y, una vez aquí, se podrían aclarar y recuperar su aspecto original. El estafador le hizo una demostración y le propuso que aportara 150.000 euros para realizar la operación con todos los billetes tintados que se habían traído de Suiza a cambio de un 40 por ciento de la cantidad total de billetes blancos que trajera.
El 29 de julio de 2005, esta persona acudió a la casa del dueño del local, que aportó 28.000 euros para realizar la operación. El estafador volvió a repetir la demostración que consistía en colocar los billetes buenos entre dos blancos, hacer un paquete e introducir un líquido. El 30 de julio se presentó en lugar de esa persona el acusado Mouchili M. diciendo que él era quien se encargaría de hacer el trabajo.
Pidió que le dejara en una habitación oscura para limpiar los billetes aunque salió y trasladó a la víctima que la mezcla del reactivo empleado no era la correcta y le pidió 8.000 euros por el reactivo. Al no tener esa cantidad, quedaron para otro día. La víctima sospechó que podía tratarse de un timo por lo que lo comunicó a la Policía, que detuvo en ese momento a la pareja.
En una entrada y registro del domicilio de los acusados de Valencia, los agentes encontraron una caja de recortes de papel blanco que simulaban billetes de 500 euros y tres cajas con sustancias y productos químicos, usados en las defraudaciones.