ALICANTE, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Solidaridad y Ciudadanía, Rafael Blasco, aseguró hoy que la prosperidad económica y el desarrollo experimentado por la Comunitat se "han traducido en beneficios económicos, sociales y culturales, lo cual hubiera sido imposible sin la aportación de la población inmigrante".
Durante el congreso 'Diálogo Norte-Sur sobre el Mediterráneo: Educación y Migraciones', el primer acto organizado por Casa del Mediterráneo, con sede en Alicante, Blasco señaló que la Comunitat "ha respondido con eficacia y garantía al creciente fenómeno de la inmigración", que en la actualidad representa un total de 882.870 extranjeros, es decir, el 17,4 por ciento de la población residente en el territorio.
En este sentido, el conseller indicó que en la Comunitat la inmigración se "ha convertido en una oportunidad y lo seguirá siendo en el futuro".
Según Blasco, la Comunitat "ha diseñado su propio modelo de integración" que se "se ampara en los parámetros de las directrices de la Unión europea (UE) y apuesta por un enfoque humanista de los movimientos migratorios".
Por ello, el conseller instó a que Europa impulse entre sus estados miembros políticas de integración comunes y consideró "imperativo" tender puentes entre las orillas del Mediterráneo.
La población inmigrante en la Comunitat ha crecido durante la última década, un 465,19 por ciento y, en ese sentido, el conseller definió las políticas sociales como de "plena integración" en los ámbitos educativo, sanitario, participación ciudadana o de protección a los grupos vulnerables, puesto que la integración es "una necesidad democrática" ya que postula la libre y pacífica convivencia de la ciudadanía respetando las normas comunes.
Asimismo, Blasco pidió que todas las administraciones públicas actúen de forma coordinada para establecer mecanismos coherentes de integración.
En la actualidad, el Consell trabaja junto a países como Grecia, Italia y países africanos como Marruecos y Senegal para abordar la problemática de la inmigración irregular y, sobre todo, informar y prevenir sobre los riesgos de este éxodo irregular hacia Europa.
Según el conseller, la emigración irregular "continuará siendo imparable mientras haya una mínima posibilidad de salir de países que carecen hoy por hoy de medios para que sus habitantes puedan subsistir dignamente".
A su juicio, "la inmigración legal puede ser una oportunidad para la UE si se trabaja por la integración en la sociedad de acogida teniendo en cuenta que en el año 2050 Europa necesitará alrededor de 56 millones de trabajadores inmigrantes por el envejecimiento de su población".
A este respecto, el conseller abogó por políticas activas de integración, con una equiparación de derechos y deberes, ante tres modelos puestos en marcha en la UE --el multicultural, propio del Reino Unido, el asimilacionista francés y el alemán que concibe al inmigrante como un trabajador-- que "no han alcanzado el objetivo de crear sociedades plurales".
