'La Caixa' concede becas de formación profesional a 39 internos de prisiones de la provincia

Los reclusos que superan la formación participan en programas de acompañamiento fuera de la cárcel para su inserción laboral

Europa Press C. Valenciana
Actualizado: lunes, 16 marzo 2009 14:23

ALICANTE, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Obra Social 'La Caixa' concede becas de formación profesional a 39 internos que cumplen la parte final de su condena en centros penitenciarios de la provincia Alicante, con el objetivo de normalizar su situación personal y profesional cuando accedan al régimen de libertad, según informaron hoy en un comunicado fuentes de la institución financiera.

Gracias a estas becas, 39 reclusos que cumplen la parte final de su condena reciben formación de cuidados auxiliares de enfermería, técnicas de laboratorio, panadería repostería, administración y finanzas, acabados de construcción, chapista pintor de vehículos, mantenimiento de maquinaria de buques e instalador de baja tensión y energía solar.

La formación se ha realizado fuera del recinto penitenciario en un régimen semilaboral, con el objetivo de familiarizar a los beneficiarios de estas becas con las obligaciones que comporta un empleo estable.

Del total de 39 internos, 30 presos pertenecientes al Centro Penitenciario de Alicante II realizarán cursos de chapista pintor de vehículos e instalador de baja tensión y energía solar, ambos de 250 horas en el centro Delfín Formación.

Además, los nueve internos restantes pertenecen al Centro Penitenciario Alicante Cumplimiento, donde recibirán cursos de cuidados auxiliares de enfermería, técnicas de laboratorio, panadería repostería, administración y finanzas, acabados de construcción y mantenimiento de maquinaria de buques.

Esta iniciativa prevé que los beneficiarios que hayan superado con éxito la formación sean derivados a programas de acompañamiento para la inserción laboral en los sectores que se hayan formado que se están desarrollando en la provincia de Alicante.

La inversión por parte de 'La Caixa' en la concesión de cada una de estas becas asciende a 4.600 euros, destinados a los costes de formación, desplazamiento del centro penitenciario al centro de formación, manutención que conlleve la jornada formativa y asignación económica mensual que recibe el interno en función de su asistencia al curso.

PERFIL DEL BENEFICIARIO

Del perfil de los beneficiarios, se desprende que de los 755 becarios del curso 2007-2008, 117 son mujeres, --el 15,4 por ciento del total--, frente al 8 por ciento de población femenina reclusa. Por edades, el 75 por ciento tiene entre 25 y 45 años, y la mitad de los beneficiarios tiene estudios de Primaria y uno de cada tres --el 29 por ciento-- Secundaria.

Así mismo, más del 95 por ciento de los beneficiarios no había recibido, hasta el disfrute de esta beca, ninguna formación específica --profesional o universitaria-- orientada al mercado de trabajo, y cerca del 85 por ciento no tenía estudios o solamente había cursado la enseñanza obligatoria.

La mayor parte de los beneficiarios de estas becas son internos cuyo régimen les permite la salida al exterior, según detallaron las mismas fuentes, quienes explicaron que, una vez finalizada la acción formativa, si el resultado es satisfactorio, el becario suele acceder al tercer grado, régimen que le permite buscar un empleo o trabajar fuera del centro.

EMPLEO E INSERCIÓN SOCIAL

El Programa de Becas para personas privadas de libertad se realiza al amparo de un convenio suscrito, en octubre de 2008, por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el presidente de 'La Caixa' y de la Fundación 'La Caixa', Isidro Fainé, por el cual a través de la Obra Social, la entidad financia este curso 2008-2009, un total de 1.000 becas, 300 más que el curso anterior.

Las becas se dirigen a capacitar y mejorar las posibilidades de encontrar empleo de un colectivo que, a menudo, presenta necesidades de formación en todos sus niveles. En este sentido, sus beneficiarios adquieren, mediante la beca, no sólo los conocimientos correspondientes a una formación profesional, sino también la asunción de las obligaciones profesionales que comporta un empleo estable.

El contacto con el exterior pretende ofrecer a los internos un contexto lo más normalizado posible, que contribuya a la adquisición transversal de competencias prelaborales --habilidades de comunicación, autoestima, orientación vocacional-- en un ambiente similar al del mercado de trabajo que encontrarán una vez que hayan cumplido el periodo de privación de libertad.

La salida diaria al exterior con el fin de realizar una acción formativa es un paso intermedio entre el régimen ordinario y el régimen de libertad, y se presenta como un instrumento "importante" para que la institución penitenciaria valore la evolución de los beneficiarios en su itinerario hacia la inserción social.

Este Programa de la Obra Social 'La Caixa' ha formado profesionalmente a 2.900 reclusos de centros penitenciarios de toda España desde el año 2005, para lo cual ha destinado un total de 13,6 millones de euros.

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