La CHJ recupera más de 70 kilómetros del río Magro con una inversión de más de 2,5 millones de euros

VALENCIA 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), a través de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), ha iniciado la regeneración medioambiental del lecho del río Magro desde Caudete de las Fuentes hasta el embalse de Forata, en la provincia. Esta actuación cuenta con una inversión superior a los 2,5 millones de euros.

El presidente de la CHJ, Juan José Moragues, presidió hoy en Requena (Valencia) la presentación del proyecto, que contempla la recuperación ambiental del río Magro desde la población de Caudete de las Fuentes hasta el embalse de Forata y presupone un "gran logro medioambiental" para las poblaciones por las que discurre --Yátova, Requena, Utiel y Caudete de las Fuentes--, que "venían reivindicando su restauración ambiental desde hace más de un decenio", según informaron fuentes de la Confederación en un comunicado..

A lo largo de más de 70 kilómetros del río Magro, se van a restaurar tramos del cauce, asegurando su regeneración y mantenimiento en el futuro, consiguiendo "promover su uso social y disfrute de la población". En estos momentos, se ha iniciado la actuación en el término municipal de Requena donde se está desbrozando el área de actuación y realizando la caracterización definitiva de los lodos.

El río Magro ha recibido históricamente vertidos urbanos e industriales sin depurar. En los últimos años, la construcción de Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) en las poblaciones que vierten a su cauce ha hecho "mejorar significativamente" la calidad de las aguas.

Los contaminantes aportados por los vertidos al caudal del río sedimentaron a lo largo de su recorrido, quedando retenidos en los lodos del lecho del cauce fluvial. Todo ello supone un grave problema para la recuperación del ecosistema, encontrándose en la acumulación de lodos en el lecho el principal problema por su contaminación. Esta situación ha contribuido a la degradación de la vegetación de ribera, al insuficiente desarrollo de las comunidades biológicas, y a la imagen general de deterioro ambiental.

Por ello el presente proyecto que ha puesto en marcha el MARM contribuirá a la eliminación de la contaminación acumulada en el lecho, mantendrá la recuperación de los espacios que se vayan regenerando y recuperará la vegetación de ribera, además las actuaciones tendrán el objetivo de la integración paisajística y ayudarán a que los procesos naturales consigan recuperar la calidad ecológica del río.

También, este proyecto contribuirá a promover una mejora de la disponibilidad de agua a largo plazo y a la sostenibilidad de su uso, mejorando el aspecto general del río. El proyecto se complementará con la creación de zonas didácticas y la señalización de las fuentes existentes, con el objetivo de contribuir a la sensibilización y concienciación de la importancia del agua.

La descontaminación de lodos, principal objetivo e hito del proyecto, influirá directamente en la mejora de la calidad del agua, como también influye la instalación de vegetación de ribera que actuará como filtro verde. Para la descontaminación de lodos se va a aplicar una técnica innovadora y de alta sostenibilidad ambiental: el tratamiento biológico potenciado de lodos.

Esta técnica es una de las denominadas de biorremediación --que consiste en la utilización de seres vivos para solucionar problemas ambientales-- y supone el tratamiento de lodos de forma biológica reduciendo al máximo el impacto ambiental. La técnica además permite la extracción mínima de lodos, por lo que se evitan grandes movimientos de suelos con actuaciones que se desarrollan in situ y solucionan problemas de modo eficaz.

Respecto a las actuaciones de regeneración ambiental, se prevé la plantación de un total de 11.524 árboles, de ellos 11.220 serán de ribera --sauces, fresnos, chopos y álamos-- y 304 árboles de acompañamiento con fruto, como saúco, higuera, nogal y almez. También se contempla la incorporación de 2.550 plantas acuáticas que incrementarán la biodiversidad del ecosistema fluvial.