ALICANTE 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El colegio Rafael Altamira de El Campello (Alicante) exigirá responsabilidades tras confirmarse la inocencia de sus monitores, que fueron acusados de abusos a menores, al tiempo que lamentaron la actuación de la Guardia Civil y de la psicóloga del Ayuntamiento, durante el proceso, según informó hoy el consejo escolar en un comunicado.
El centro educativo exigirá a los organismos competentes, Ayuntamiento, Generalitat y Delegación del Gobierno, "dilucidar responsabilidades y reparar débitos, entre quienes han contribuido a este despropósito, para que nunca vuelvan a producirse ignominias de esta magnitud en ningún colegio del mundo".
El pasado viernes se reunió el consejo escolar del centro, tras hacerse pública la resolución de la Audiencia Provincial de Alicante, en la que se ratificaba la inocencia de los monitores varones del colegio, ya expresada por el juzgado de instrucción número 4, en septiembre del pasado año, acordando el sobreseimiento libre y definitivo de las actuaciones, que en noviembre de 2008, "alteraron el normal funcionamiento del decano y mayor colegio de la localidad".
Así, acordó "por unanimidad congratularse por la confirmación de lo que desde el primer momento defendió la comunidad escolar, es decir, la inocencia de los cuidadores y la falsedad de la patraña inventada por la madre de la niña, puesto que el régimen de funcionamiento del colegio y el comedor escolar, y el sistema de vigilancia, hacían imposible la realización de los hechos denunciados".
Para los representantes educativos, "el único peligro real de todo este lamentable proceso se produjo con la entrada en el recinto de miembros de la Guardia Civil, armados y sin orden judicial alguna, en la hora de salida, la de mayor concurrencia, creando una innecesaria alarma social".
Igualmente, también lamentaron el "inusitado impacto mediático", que convirtió este asunto en "'carnaza' para cierto tipo de programas sensacionalistas", a los que acusaron de "difamar y calumniar al profesorado y resto de trabajadores, arruinando 35 años de ejemplarizante trabajo, al difundir a nivel estatal e internacional una imagen degradada e indigna del Rafael Altamira, difícil de restaurar".
El consejo escolar también lamentó "la actuación de la psicóloga del Ayuntamiento, quien sin previo reconocimiento de la menor, ni contactar con los responsables del colegio, ni comunicarse con el Gabinete Psicopedagógico, emitió un informe inculpatorio, que sirvió de justificación para la actuación irracional, desproporcionada y sin causa alguna --como han confirmado tanto el juzgado número 4 de Alicante, como la Audiencia Provincial--, del jefe de puesto de la Guardia Civil de El Campello".