VALENCIA 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Consell, Esteban González Pons, manifestó hoy que es "una mala noticia para la democracia" que, según señaló, "se permita una manifestación o un acto neonazi el día 1 de mayo", convocado por la formación Alianza Nacional, con "una proximidad tan grande" a la manifestación que realizarán los sindicatos con motivo de la celebración del Día del Trabajador, y achacó este hecho a un "error" de la Delegación de Gobierno.
González Pons, que se pronunció de esta manera en la rueda de prensa posterior a la reunión del pleno del Consell, afirmó que el 1 de mayo "ha sido siempre una fiesta de los trabajadores y de los sindicatos y una reivindicación festiva", por lo que, a su juicio, "sería dramático" y "no estaría nada bien" que, "por un error, y quiero pensar que es un error de la Delegación del Gobierno --apostilló--, al final la noticia del 1 de mayo sea de los neonazis y no de los honrados trabajadores de la Comunitat".
El portavoz del Consell destacó que Valencia "es la ciudad de la America's Cup y del Encuentro Mundial de las Familias y es una capital mediterránea por excelencia, lo más alejada de las aspiraciones de los nazis, neonazis o ultranazis que quepa en mentalidad alguna".
En esta línea, defendió que, "dentro de los límites de la ley, los demócratas tenemos la obligación de hacer todo lo posible para que estas fuerzas totalitarias que niegan las libertades de todos tengan las menos posibilidades de manifestarse".
Señaló que la pregunta al delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, "no es si cercena la libertad de expresión permitiendo que se manifiesten los ultranazis o neonazis", sino "por qué no ha hecho todo lo posible, en los márgenes que la ley le permite, para impedir que el 1 de mayo, y cerca de donde estén celebrando su fiesta las trabajadoras y trabajadores, los neonazis monten un acto", que calificó como una "clarísima provocación", "y le roben el protagonismo a quienes lo merecen ese día, que son los trabajadores", insistió.
En este punto, González Pons citó la ley orgánica 9/83 de 15 de julio que regula el derecho de reunión y cuyo artículo 10 señala que si la autoridad gubernativa "considerase que existen razones fundadas de que puedan producirse alteraciones de orden público con peligro para personas o bienes podrá prohibir la reunión o manifestación o, en su caso, proponer la modificación de la fecha, lugar, duración o itinerario de la reunión o manifestación".
"EVITAR INCIDENTES"
Así, aseguró que el delegado del Gobierno "tiene en su mano prohibir, suspender o trasladar" la manifestación de Alianza Nacional, convocada en la plaza de Zaragoza de Valencia, y "evitar incidentes que no deseamos nadie que se produzcan".
Recordó que cuando era delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana Carmen Mas, "evitó" el 3 de abril de 2002, "por razones de tráfico y de ordenamiento de la ciudad", que una "manifestación ultraderechista que se quería convocar el 27 de abril" coincidiera con la convocada por Acció Cultural del País Valencià con motivo del 25 d'Abril.
Por todo ello, señaló que a Bernabé "oportunidades y margen tiene; la cuestión es querer o no querer", a la vez que indicó que él "personalmente" llevaría "siempre la ley un milímetro más allá de lo que la propia ley me permitiera para evitar que neonazis, ultranazis, radical-nazis o cualquier tipo de totalitario irrespetuoso se manifestara el día 1 de mayo cerca de quienes merecen ser los titulares de la fiesta, que son los trabajadores".
Recalcó que le gustaría que el delegado del Gobierno "hiciera lo mismo" e insistió en su deseo de que de la decisión de Bernabé, "sea cual sea, no se derive ninguna consecuencia, y que, en todo caso, el 1 de mayo transcurra en paz, con las personas de esta ideología lo más lejos posible de nosotros".