VALENCIA 26 May. (EUROPA PRESS) -
El Consell declaró hoy bien de interés cultural inmaterial el Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia, tercera manifestación cultural a la que se da este reconocimiento que figura la ley de Patrimonio Cultural Valenciano, según informó el portavoz del Ejecutivo, Esteban González Pons.
El Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia constituye una de las muestras "más representativas y valiosas" de la cultura y las formas de vida tradicionales de los valencianos y disfruta de un "amplio grado de reconocimiento local, nacional e internacional". La Generalitat ha declarado hasta el momento bienes de interés cultural inmaterial el Misteri d'Elx y el Betlem de Tirisiti de Alcoi.
La Generalitat considera en su acuerdo que el Tribunal de las Aguas es "herencia viva del sistema de gobierno de las aguas en la huerta en época islámica", que "posee un valor excepcional desde la óptica histórica, antropológica y jurídica", y que es "uno de los principales derechos definitorios de la identidad cultural de los valencianos, tanto como su lengua, en la cual se expresan sus veredictos".
El Consell otorga este reconocimiento porque entiende que "su significación excede con mucho el marco de la Comunitat Valenciana, ya que constituye un monumento del proceso histórico de génesis y transferencia de la refinada cultura andalucina del agua desde sus orígenes en el Próximo Oriente y en el norte de África hasta el Nuevo Mundo". Se trata, añade, de "un tesoro del patrimonio cultural inmaterial valenciano con una dimensión universal incuestionable".
El Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia fue, durante los casi tres siglos que hay entre los decreto de Nueva Planta de 1707 y el Estatuto de Autonomía de 1982 "la única instancia administrativa y gubernativa, cuyos procedimientos y resoluciones se expresaban íntegramente en lengua valenciana".
Este tribunal tiene una doble función, jurídica y gubernativa administrativa, orientada al buen funcionamiento del complejo sistema de regadío que articula la huerta más próxima a la ciudad de Valencia.
Está integrado por los síndicos que presiden ocho e las comunidades de regantes que riegan el ámbito de la huerta de Valencia más próxima a la capital del Turia: Tormos, Rascaña y Mestalla en la ribera septentrional del rio Turia; así como Quart, Benagéber y Faitanar, Favara, Mislata y Rovella en la meridional.
REPRESENTACION
Los valores que han determinado la declaración de bien de interés cultural inmaterial se basan en su carácter de representación ritual, ligada a un espacio temporal en el que se llevan a cabo sus reuniones, en un espacio físico concreto, la puerta de los Apóstoles de la catedral de Valencia, y sus características únicas, tanto en la Comunitat Valenciana como en el resto del Estado español.
De acuerdo con la ley del Patrimonio Cultural Valenciano, se establece como medida de protección que la Generalitat cooperará en la conservación de los valores consuetudinarios y tradicionales de Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia.
También se encarga a la dirección general de Patrimonio Cultural Valenciano que garantice el estudio y la documentación de esta manifestación cultural con criterios científicos y con incorporación e los testimonios disponibles en soportes materiales que garanticen su pervivencia.
La conservación del Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia está supeditada al mantenimiento de las comunidades de regantes y a la práctica de la agricultura tradicional de regadío en la huerta de valencia, por lo que la Generalitat, en coordinación con las entidades locales implicadas y las comunidades de regantes, arbitrará las "medidas oportunas" para garantizar la pervivencia de esta ancestral institución.