Las Corts aprueban con los únicos votos del PP la proposición de ley de modificación de la ley estatal del Deporte

VALENCIA 12 Jul. (EUROPA PRESS) -

El pleno de las Corts Valencianes aprobó hoy, con los únicos votos favorables del PP y el rechazo de PSPV y EU-Entesa, una proposición de ley, que será ahora remitida al Congreso de los Diputados, para que se reforme la ley estatal 10/1990 del Deporte, al objeto de prohibir la utilización de espectáculos o recintos deportivos para realizar actos de contenido político ajenos a los fines que le son propios.

La propuesta de reforma fue aprobada por el Consell de la Generalitat y remitida a la Cámara tras los hechos acaecidos el 22 de octubre del año pasado en el Camp Nou, cuando se desplegó un mapa de los Países Catalanes en el partido entre el Barcelona y el Osasuna.

El texto aprobado hoy pide que esta ley estatal refleje, entre otras cuestiones, la prohibición de realizar, durante la celebración de competiciones de carácter profesional, "actos de contenido político ajenos a los fines deportivos" que sean constitutivos de ofensas o ultrajes" a "España, a sus comunidades autónomas o a sus símbolos o emblemas".

El portavoz adjunto del PP Rafael Maluenda señaló que la proposición de ley responde a un compromiso que adoptó el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, tras el "atentado contra los derechos constitucionales y estatutarios del pueblo valenciano" ocurrido en el Camp Nou el año pasado, lo que, a su juicio, demuestra que el PP y el Consell "han cumplido" con su palabra.

Maluenda justificó la necesidad de esta reforma para que "hechos como los que ocurrieron en el Camp Nou no se vuelvan a producir" y "quede prohibido hacer uso de los estadios para hacer política sectaria y atentatoria contra los derechos constitucionales" y para promover actos "que generan violencia".

El diputado popular señaló que el 22 de octubre se desplegó en el campo del Barcelona CF "un mapa de una utopía contraria a los derechos históricos y constitucionales de la Comunitat", y defendió que este hecho no se puede equiparar al uso de camisetas con el lema 'agua para todos' por equipos de fútbol y baloncesto valencianos, que "no atenta contra el derecho de nadie".

Por el contrario, el PSPV, a través de la diputada socialista Jeannette Segarra, censuró que el PP pretenda "malgastar el tiempo" con la aprobación de esta proposición de ley, ya que, según subrayó, el proyecto de ley contra la violencia en el deporte aprobado el pasado día 5 por el Gobierno central "deroga todos los artículos que quieren modificar" ahora los populares.

Segarra manifestó además que esta ley, al contrario de lo que proclama el PP, busca la "politización" en el mundo del deporte, y refleja la "doble vara de medir" del Ejecutivo valenciano a la hora de apoyar el uso de camisetas con el lema "agua para todos" en jugadores valencianos o con su "silencio" ante pancartas en el Calderón sobre el general Mena o a favor del asesinato del joven Guillem Agulló, fallecido en Montanejos en 1993, en el derbi que enfrentó al Levante UD con el Valencia CF y exhibiciones de "vale-tudo" en Mislata.

POLITIZAR

La diputada aseguró que esta propuesta únicamente busca "politizar y enfrentar al mundo deportivo" ante unos hechos, los del Camp Nou, que consideró "condenables", como también lo fue, en su opinión, el tratamiento posterior de los mismos por Canal 9 o las "barbaridades" pronunciadas por el en aquel momento portavoz del Consell, Esteban González Pons.

Segarra contrastó la "desmesura" del PP ante estos hechos con la actitud que mantiene el Consell ante el dopaje en el ciclismo, una afirmación que Maluenda calificó de "poco afortunada", ya que implica "condenar" antes de que se juzgue a las personas. Maluenda pidió al PSPV que no ponga "el carro antes de las mulas" y aseguró que no debe caber duda de que el Consell "cuando llegue el momento, tomará la decisión que corresponda".

El diputado de EU-Entesa Ramon Cardona afirmó que la ley es "absolutamente inútil" y recriminó al PP que la apruebe por "motivos absolutamente desviados" y haga "perder tiempo" a la Cámara "por una concepción particular de la política". Según dijo, esta iniciativa "no responde a ninguna necesidad", "sólo está movida por la huida de la irracionalidad" que se percibe "en los bancos del Consell" y es una muestra de que se pretende "avivar pasiones" y convertir la política en una "colección de sentimientos".