Crespo niega ninguna hoja de ruta para privatizar la empresa y defiende la adjudicación a Aguas de Valencia

Actualizado: miércoles, 6 junio 2012 21:43

VALENCIA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

El expresidente de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) y de Emarsa, Enrique Crespo, ha negado en la quinta declaración que presta como imputado en los últimos días ante el juez que investiga el agujero de 25 millones de euros en la empresa que gestionó la depuradora de Pinedo que existiera una hoja de ruta para privatizarla y que, a su disolución, se hizo un concurso que "justamente" ganó Aguas de Valencia.

Crespo ha lamentado que se le haya colgado desde la Emshi el "san benito" de que había adjudicado a Aguas de Valencia un contrato irregular por 50 años, a raíz del fallo dictado recientemente por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana y ha defendido que esa adjudicación estuvo "visada" por los técnicos de la Emshi "sin ningún tipo de informe desfavorable" y fue llevado a la asamblea donde se aprobó la contratación.

De esta forma, ha hecho referencia a la decisión del TSJCV de anular la adjudicación cuando Crespo era presidente a Aguas de Valencia del suministro de agua potable como socio privado de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) en el área metropolitana al considerar que los dos informes técnicos en los que se apoyaba la decisión para la adjudicación son "prácticamente idénticos" y uno correspondía a una empresa sin la "habilitación profesional necesaria".

Aunque ha dicho que no ha leído el fallo, ha señalado que si se estima que fue por contratar los estudios de una empresa que no tenía como objeto social el tema de aguas, esta firma se contrató "a indicaciones del vicealcalde del Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Grau, puesto que el Ayuntamiento estaba muy preocupado en este contrato porque podía afectar a sus intereses y no confiaban con la imparcialidad del técnico de Emshi" por sus "antecedentes políticos" como concejal de IU en el consistorio, y exigían un informe previo de valoración de las ofertas por una firma que les diera "confianza" como era la elegida, porque tenía un técnico especializado en temas de agua.

NIEGA TODAS LAS ACUSACIONES DE ARNAL

Asimismo, durante su declaración, ha negado todas las atribuciones que le ha hecho el exdirector financiero de Emarsa, Enrique Arnal, imputado en la causa, en relación con "planes preconcebidos" con directivos de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) como Juan José Morenilla o Ignacio Bernácer, ha reiterado que no contrató a Esteban Cuesta como gerente --se aprobó por el Consejo-- y ha rechazado saber nada de temas de Rumanía.

En esta línea, ha rechazado la "trama" que dibuja Arnal "rocambolesca con cajas de cartón, billetes pequeños, a la altura de muchas películas de Hollywood", así como ser el "origen del mal" o la "bestia negra" del desvío de dinero. Crespo se ha referido en su comparecencia a que el también imputado Juan Carlos Gimeno, ex edil del PP en Valencia, le advirtió sobre Arnal, en caso de que se fuera contra él en la querella, porque tenía antecedentes por estafa.

CONTRATOS HEREDADOS

Asimismo, ha afirmado que en Emarsa se contrataba a muchas personas de "índole u origen político hasta incluso normas no escritas pero sí asumidas históricamente por la empresa de heredar los puestos de trabajo, pasando de padres a hijos".

También se contrataba a personas procedentes de partidos que habían dejado esta actividad. En todo caso, ha apuntado que, aunque tenía delegadas esas facultades, nunca las ejerció ni tomó parte en la contratación de ningún personal ni en el despido de nadie. Incluso, según ha dicho, se negó a seguir con esa norma de que cuando se jubilaba alguien entrara a trabajar un miembro de su familia, "no por ello sin tener graves problemas" con personas que se jubilaban y le achacaban haber "roto" el "ciclo histórico".

Preguntado por si ese criterio se compartía por el resto del consejo o si alguien disentía, ha señalado al juez que hizo partícipe al Consejo de su criterio en una reunión, aunque desconoce si constaba en acta. En el caso de no constar, lo atribuye a lo "delicado del planteamiento de la situación", por el hecho de "dejar patente una norma no escrita y seguida durante muchos años y con prueba fehaciente" ya que sostiene que se puede demostrar en la plantilla la sucesión de padres a hijos.