VALENCIA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los numerosos yacimientos localizados alrededor de la excavación de La Carència (Turís) por parque del equipo arqueológico de la Diputación de Valencia, un total de 64, refuerzan la tesis sobre su identificación como la urbe iberorromana conocida como Kili/Gili, expuesta por la directora de excavación del proyecto, Rosa Albiach.
Según explicó hoy la arqueológa, "las tareas de prospección para localizar nuevos asentamientos, iniciadas en 2001, son duras, es un trabajo pesado, pero los resultados compensan y arrojan información valiosa sobre la orientación de estos pequeños asentamientos rurales, orientados con visibilidad hacia la Carència, situados en sus inmediaciones".
Estos 64 asentamientos menores tienen significado en torno a una ciudad que, en la tesis del equipo del SIP, sería el poblado iberorromano de La Carència/ Kili.
Ante los resultados obtenidos en la campaña arqueológica de La Carència, el diputado de Cultura de la Diputación de Valencia, Vicente Ferrer, ha mostrado su satisfacción por el excelente trabajo desarrollado por los expertos y técnicos del Servicio de Investigación Prehistórica (SIP).
En opinión de Ferrer, "disponemos del mejor equipo humano posible y de unos magníficos proyectos de excavaciones que, junto a la tradición de estudio e investigación prehistórica de la Diputación, que se remonta a 1927, hacen necesario un esfuerzo económico con destino a la campaña arqueológica del SIP, tal y como hemos realizado esta misma campaña con un aumento del presupuesto del 15'6 %", subrayó.
Entre los 64 yacimientos ya localizados "encontramos pequeñas aldeas, asentamientos rurales, y pequeñas fortificaciones, situados estratégicamente en las laderas de las montañas, en las llanuras, cerca de cursos de agua, manantiales o barrancos", apuntó Albiach.
La ubicación de estos asentamientos en torno a la gran ciudad, La Carència/Kili, refuerza el papel de ésta como núcleo de gobierno y mercado principal, como centro redistribuidor de productos locales, regionales y también de importaciones, "tal y como reflejan los numerosos hallazgos cerámicos itálicos y griegos", expuso la especialista.
Respecto a estos hallazgos, Isabel Caruana, miembro del equipo del SIP y experta en cerámica, destacó que las importaciones cerámicas halladas son de procedencia griega e itálica, tales como fragmentos de ánforas itálica y de barniz griego.
Su presencia en las inmediaciones de La Carència, "nos habla del comercio de su poblado que en el momento cronológico en el que nos movemos estaba muy conectado con la península itálica y la cultura griega, y su llegada al enclave de Turís podría ser fluvial, a través del Magro, o bien por comercio terrestre, documentado por las vías principales de acceso al interior", comentó Caruana.
El papel fundamental de las numerosas aldeas y asentamientos rurales sería con toda probabilidad la agricultura y ganadería, mientras que las pequeñas fortificaciones, ubicadas en altura, actuarían como atalayas de control de las zonas de paso hacia la urbe.
Junto a estas argumentaciones que refuerzan la tesis de La Carència como "firme candidata a convertirse en la enigmática ciudad de Kili, habría que añadir, que es la única urbs de gran entidad, fortificada y de gran extensión, 8,5 hectáreas, que ha sido localizada en este territorio desde que la Diputación de Valencia inició las campañas de excavación", señaló Albiach.
FUTURAS CAMPAÑAS
La experta agregó que "los trabajos de prospección, realizados en gran parte del territorio de Turís, parte de Montroi y Montserrat, nos han permitido localizar multitud de asentamientos y aldeas menores, pero ninguno de la entidad de La Carència". Añadió que "en futuras campañas, continuaremos con esta doble faceta arqueológica, prospección y excavación, para ampliar la información sobre el territorio".
En este sentido, el diputado de Cultura, Vicente Ferrer, anunció que la Diputación de Valencia iniciará el próximo año una primera monografía del SIP sobre las averiguaciones de La Carència y los materiales hallados, tanto en el primer proyecto de Milagros Gil-Mascarell, realizado en 1971, como en los últimos trabajos, retomados en 2001.
La monografía incluirá información del territorio según las épocas de ocupación, ibera y romana, el estudio estatigráfico del terreno, los datos sobre las técnicas de construcción y cronología de las tres murallas del poblado y los primeros resultados de los estudios de apoyo del georradar y de las restituciones fotogramétricas en 3D.
Tal y como adelantaba la arqueóloga Albiach, la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) empleará un georradar por la zona para ver las estructuras del subsuelo y estudiar la conveniencia de futuros trabajos.
Así, Jorge Padín, de la UPV, se trasladará la próxima semana a La Carència, para pasar el georradar en una zona de 16 x 16 metros cuadrados, en la terraza más alta de La Carència. "La información que se obtenga servirá para orientar los futuros trabajos de excavación", avanzó Albiach.
