MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
El artista Miguel Calatayud (Alicante, 1942), galardonado hoy con el Premio Nacional de Ilustración 2009 por el conjunto de su obra, afirma que la ilustración está viviendo "una época maravillosa" donde cada vez existe más demanda y donde están surgiendo nuevos profesionales y un reconocimiento mayor de toda la sociedad. Asimismo, opina que "los ordenadores facilitan el trabajo del ilustrador aunque se pierde un poco el sentido artesanal".
"Antes había gente que se dedicaba a la ilustración sin mayor interés", reconoció Calatayud en una entrevista con Europa Press. Para el artista, que también recibió el Premio Nacional de Ilustración en 1989 por su obra 'Una de indios y otras historias' y en 1992 por 'Libro de las M'Alicias', cada vez se habla más de la ilustración y surgen más exposiciones relacionadas con la profesión.
Aunque también ha sido comisario de varias muestras como 'Originales para cinco rondallas' o 'Animales en su tinta' dentro del II Salón del Libro Infantil Ilustrado Ciudad de Alicante, Calatayud puntualizó que las ilustraciones no están hechas para colgarse en una pared sino para ser reproducidas. En este sentido, reconoció que "la aparición del ordenador y de nuevas tecnologías eliminan el interés por el dibujo original".
"LO ÚLTIMO SIEMPRE LO MEJOR"
Sin embargo, Calatayud no se considera un opositor a las nuevas tecnologías. "Los ordenadores han facilitado mucho el trabajo del ilustrador, y aunque se pierda un poco el sentido artesanal, si son sabiamente utilizados y se tiene ingenio, siempre será una buena herramienta", sentenció el artista quien reconoció que para él, "la emoción del trabajo creativo sigue estando en manchar el papel".
Calatayud se definió como un "gran defensor del dibujo, del trazado lineal basado en la tinta china y de una iluminación basada en el trabajo de la acuarela por su transparencia y su efecto final". Elementos geométricos, lineales y curvos y las formas estilizadas también pueblan sus creaciones que Calatayud considera "deudoras de las vanguardias y el modernismo".
Por otra parte, el ilustrador alicantino se sintió incapaz de destacar ninguna obra en especial de toda su trayectoria. "Siempre pienso que lo último que he hecho es lo mejor y de lo que quedo más satisfecho", comentó el artista quien citó el libro de gran formato 'Calandraca', un álbum de cuentos contemporáneos del escritor Carlos Pérez sobre un león, África y un circo de París.