VALENCIA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El Nuevo Ballet Español llega mañana al Teatro Principal de Valencia con un espectáculo que emana la "fuerza" y el "colorido" la danza flamenca pero con el aire "fresco y elegante" de las generaciones actuales. Tradición y modernidad se aúnan 'Sangre', una sucesión palos flamencos, bulerías, tangos, zapateados, jaleos, martinetes... que incluye desde pasos a dos, hasta números de grupos masculinos y femeninos, y dos solos Carlos Rodríguez y Ángel Rojas, donde ambos fundadores de la compañía dan rienda suelta a la improvisación.
Tras el éxito de Pitingo con su fusión de flamenco y música negra en 'Soluería', el ciclo 'Flamenco en el Principal' continua a ahora con la compañía de Rojas & Rodríguez para presentar al público valenciano este montaje que lleva año y medio recorriendo los teatros internacionales, y que se quedará en el Principal hasta el domingo 31 de mayo.
'Sangre', presentado hoy en rueda de prensa por dos sus bailarines principales, pretende ser un "homenaje al público" apuntó Rojas. Para el bailarín, en este trabajo ha logrado encontrar la conexión entre lo que le gusta al público y lo que "apasiona" a los artistas, que se van al camerino con la sensación de haber realizado un actuación "con rigor, seriedad y mucha alma", aseguró.
Un total de 12 bailarines, 8 músicos-- un violín, un violonchelo, un flauta, dos guitarras, dos cantes y una percusión-- junto a toda una serie de personas detrás hasta sumar 24 profesionales, dan vida a estas coreografías del Nuevo Ballet Español que renuevan el flamenco más tradicional para cumplir con la "obligación moral como artista de cuidar el patrimonio de su país", subrayó Rojas.
En este sentido, el bailaor apuntó que cada década se produce un "cambio" en la danza flamenca y en los años 90 les tocaba a ellos "tirar del carro" y llevar a cabo una "renovación" en el género. Es parte de su "responsabilidad profesional", sentenció.
En la misma línea, Carlos Rodríguez señaló que "cada uno tiene que aportar su granito de arena", y mientras hay gente que trabaja la tradición, otros han de investigar en la vanguardia, de lo contrario la oferta se quedaría "coja", advirtió. Así, 'Sangre' "limpia y desempolva" el flamenco más tradicional para desarrollar la creatividad coreográfica de los jóvenes bailarines, que han bebido de todos los estilos (jazz, contemporáneo, clásico, arte dramático...) durante sus años de estudio en el conservatorio.
Esta representación carece de hilo argumental, lo que según Rodríguez, les da "libertad para crear un espectáculo equilibrado a nivel coreográfico" lleno de puntos álgidos dentro de los palos del flamenco, los más rítmicos y los más descompasados, o los más lentos. Ofrece "lo que el público quiere ver cuando va a ver un espectáculo flamenco, pero se sorprende porque está llevado a la calidad, hay virtuosismo escénico".
Según va llegando al final "cada vez va a más". "Tiene un punto elegante" que hace que la danza se repose, en muchos de los cantes pero también hay momentos en los que se "utiliza la percusión para mostrar lo más virtuoso del elenco de bailarines", explicó el bailaor, quien destacó que todas las composiciones son originales, creadas especialmente para esta función.
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