VALENCIA, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
La actriz estadounidense Raquel Welch (Chicago, 1940) aseguró hoy en Valencia --donde esta noche será homenajeada en la gala de apertura de la Mostra de València-Cinema del Mediterrani-- que acepta que ser un 'sex-symbol' ha sido su "identidad profesional" aunque lamentó que Hollywood, "que no vive hoy su época dorada", destacó, "sólo quiera ver a las actrices siempre guapas y glamourosas", ya que esto provoca que las mujeres lo tengan difícil para conseguir algunos papeles.
La veterana artista afirmó hoy en rueda de prensa que las mujeres maduras "nunca lo tienen fácil, ni en el cine ni en la vida" pero hizo notar que la industria norteamericana también pone obstáculos a algunas estrellas jóvenes. Entre ellas, citó el caso de Charleze Theron, "quien tiene dificultades para ser tomada en serio porque es glamourosa y muy bella". Igualmente, consideró que la española Penélope Cruz --"tan exótica y guapa", según la calificó-- en España puede seguir haciendo películas con Pedro Almodóvar pero en Estados Unidos tiene que estar siempre sensual y sexy".
No obstante, Raquel Welch, conocida como 'El Cuerpo', no renegó de su condición de icono sexy de la historia del séptimo arte gracias a películas como 'Hace un millón de años'. Sobre esta cuestión, hizo notar que un actor "no controla la imagen que se tiene de él y no puede escapar de ella" y agregó que el público "suele quedarse con la que das al principio de tu carrera". Aun así, la actriz se felicitó por haber participado a lo largo de su trayectoria en películas que han dejado ver "mi otra parte", entre las que destacó 'Los tres mosqueteros', de Richard Lester, por la que ganó un Globo de Oro a la Mejor actriz.
Welch, de padre boliviano, recalcó que no se siente una actriz latina, ya que "nací, crecí y he desarrollado toda mi vida en Estados Unidos". Aun así, recordó que "cuando llegué a Hollywood por mis rasgos latinos y mi temperamento, me consideraron exótica y no sabían en qué tipo de papeles encajarme". Incluso, agregó, intentaron cambiar mi nombre por el de Debbie. "Fue la primera vez que no me encontraba americana", apostilló.
La actriz lamentó también no hablar español y explicó que su padre llegó muy joven a Estados Unidos para trabajar como ingeniero y le resultaba más fácil hablar un solo idioma, por lo que nunca empleó el castellano en el hogar. Por este motivo, "aunque me encantaría trabajar en España y con artistas españoles, como Carlos Saura o Pedro Almodóvar, sería un problema porque no domino el idioma", admitió.
"MUCHO TRABAJO" PARA SEGUIR BELLA.
A la artista se le interrogó también por el secreto de su belleza, que mantiene a los 67 años. "Mucho trabajo", dijo entre risas, y confesó que lleva a cabo una labor de intenso mantenimiento. "Hoy mismo he ido ya al gimnasio", dijo Welch. En esta línea, apuntó que "hago lo que cualquier mujer del mundo cuando envejece, régimen y ejercicio".
Interrogada por su opinión sobre el cine del Mediterráneo, la intérprete señaló que "solo veo el que llega a mi país" pero destacó la gran "sensibilidad y la importancia de las relaciones humanas por encima de los efectos especiales" que se da en las cinematografías de estos países.
Raquel Welch tuvo, por otra parte, palabras de elogio para la ciudad de Valencia, que consideró "una de las más bellas que he visto" y de la que subrayó su "increíble contraste entre la arquitectura de vanguardia de Santiago Calatrava y la tradicional española". Igualmente, expresó su admiración por los trajes de fallera y por la paella valenciana, "que he tenido la oportunidad de probar y me encanta", aseguró.
