Cultura.-Rubén Olmo propone en el Principal un recorrido a través del flamenco por las pasiones del torero Juan Belmonte

VALENCIA 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Teatro Principal de Valencia pondrá en escena, desde mañana y hasta el próximo 28 de enero, el espectáculo 'Belmonte, la danza hecha toreo', la primera producción de la Compañía Rubén Olmo en la que el coreógrafo y bailaor sevillano ofrece un recorrido biográfico y "flamenco" por el "arte, las pasiones y el delirio" del famoso matador, según señaló hoy en rueda de prensa el propio artista.

El montaje, en el que participan 14 intérpretes procedentes de agrupaciones como el Ballet Nacional y las compañías de Antonio Canales y Joaquín Cortés, narra la trayectoria vital del torero Juan Belmonte desde 1904, cuando con 14 años ingresó en la Escuela de Tauromaquia de Sevilla, hasta su suicidio, pasando por su especial relación de "amistad y rivalidad" con Joselito 'El Gallo'. De hecho, fue la desaparición de este torero lo que desencadenó la muerte de Belmonte ya que, según aseguró Rubén Olmo, "todo artista necesita un rival porque le ayuda cada día a enfrentarse con el público". Al respecto, el bailaor confesó que él mismo está buscando ese contrapunto artístico, como en su día lo fueron "Canales y Cortés", puso como ejemplo.

Para recrear la vida de Belmonte y los entresijos de la Edad de Oro de la tauromaquia española, Olmo ha realizado un espectáculo que mezcla "diferentes lenguajes musicales y de al danza" y que refleja la formación ecléctica que ha acumulado el artista gracias su paso por el Ballet Nacional, donde ejerció como primer bailarín, su trabajo junto a Canales o Rafael Amargo o su colaboración con Ramón Oller.

Así, las diferentes escenas se narran por medio del flamenco, la danza española pero también hay un "guiño" a la danza contemporánea, utilizada para contar el trágico final de Belmonte. El repertorio musical es también variado, ya que incluye coplas como 'Ojos verdes', pasodobles y creaciones actuales.

HEMINGWAY Y VALLE-INCLAN

Con estos ingredientes, la obra evoca una España efervescente que recrea la vida en los tablaos flamencos de los años 20 en los que despuntaban artistas como Lola Flores. Era un tiempo en el que los toreros compartían amistad con personajes de la talla de Ernest Hemingway, Zuloaga o Valle-Inclán. Precisamente, el título del espectáculo está extraído de una crítica taurina de este último escritor.

Rubén Olmo, que admitió que existe "ciertos paralelismos" entre él y su protagonista, destacó que ha tratado el personaje con "gran respeto, porque le he cogido mucho cariño" y destacó de Belmonte su "humildad". Por este motivo, no se ha puesto énfasis en el suicidio del torero. "No me pego un tiro en el escenario", dijo Olmo, que agregó que "se huele y se escucha pero queda para la intimidad". Igualmente, se ha procurado mantener una gran minuciosidad histórica que se plasma, por ejemplo, en el hecho de que los trajes que luce Olmo son réplicas exactas de los que vistió Belmonte.

Sobre su nueva compañía, Rubén Olmo comentó que después de haber pasado por puestos de "responsabilidad" crear una agrupación propia era "un paso natural". Ya está preparando su segundo montaje, que contará con la colaboración de Ramon Oller y el compositor Roque Baños.

El artista señaló lo "difícil" que está en la actualidad el mundo de la danza pero confió en poder "ganarse el respeto de sus compañeros de profesión".

De hecho, aseguró que prefiere estar "más en la sombra que ser conocido por otros derroteros diferentes al de la danza para los que no estoy preparado". En este sentido, recordó que participó en la edición pasada del programa de televisión "Operación Triunfo" y "tuve la oportunidad de darme a conocer, de poner verde a un niño y salir en todas partes" pero prefiero "que se me conozca por mi trabajo", insistió.

Por otra parte, y preguntado por su opinión sobre los toros, reconoció que se trata de una fiesta "que me encanta" aunque agregó que es cierto que "se maltrata mucho al animal" por lo que abogó por estudiar fórmulas para que la tauromaquia no desaparezca y que sufra menos el animal.