VALENCIA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
El sociólogo y profesor de la Universidad de París X-Nanterre, Laurent Bonelli, aseguró hoy que los inmigrantes "tienen la misma tasa de delincuencia que los nacionales" ya que, dijo, "ni en España, ni en Italia, Francia o Gran Bretaña los inmigrantes son más delincuentes que los demás", al tiempo que pidió que tengan representación política "porque si no, tampoco tienen voz, y no se les puede aportar soluciones a sus problemas cotidianos".
Bonelli realizó estas declaraciones en una rueda de prensa tras exponer su conferencia 'El modelo de la Universidad de París de los suburbios franceses' durante unas jornadas celebradas ayer y hoy en las Corts bajo el título 'Inmigración y Sociedad: un compromiso social desde el poder legislativo'. A la comparecencia también asistió el presidente del Parlamento autonómico, Julio de España; el presidente de las Cortes de Castilla y León, José Manuel Fernández y el de la cámara de Canarias, Gabriel Mato.
Así, indicó que, junto a la representación política, también "se debería evitar la concentración de los inmigrantes en diferentes zonas aisladas, ya que este hecho no soluciona ningún problema". "Hay que imponer la mezcla social, porque la población estaría mucho mejor, aunque es complicado", apostilló.
Preguntado por si el panorama de inmigración que actualmente existe en Francia se puede extender a Europa, señaló que "no hay un modelo que se extienda al resto de países, este fenómeno puede afectar a España pero de otro modo", aunque destacó que hay algo común, y es "preguntarnos qué sitio damos a la juventud sin calificación en la sociedad".
Por otro lado, aseguró que los problemas sociales como la precariedad laboral, el regreso de la violencia juvenil, la concentración en barrios de escala social baja y el endurecimiento policial y judicial "fueron la chispa que originó los conflictos en Francia". Explicó que "el regreso de los disturbios juveniles en Francia a partir de los años 80 es la consecuencia directa e inevitable de formas de precariedad laboral que han vuelto en este momento".
Por su parte, el presidente de las Cortes de Castilla y León y presidente de la Conferencia de Presidentes de Parlamentos Autonómicos (Coprepa), José Manuel Fernández, indicó, ante la escasa participación política de los inmigrantes, que los parlamentos "tenemos la obligación de combatir esa falta de participación de esas personas que vienen desde la inmigración" y, para ello, dijo, "debemos abrir nuestras instituciones con el objetivo de que ellos entren en el juego democrático".
Indicó que tienen la obligación de abrir los parlamentos "también a que se sientan representados para evitar marginalidad política, una forma de no querer participar del sistema democrático, ése es el esfuerzo que tenemos que hacer los parlamentarios en esta materia", apostilló.
"La inmigración ordenada es necesaria, les acogemos y les necesitamos. Por lo tanto, lo que se plantea es aprender cómo llevar la integración de esa inmigración en la sociedad", apuntó Fernández, al tiempo que añadió que "debemos acertar en esa política y aprender de otros países".
Por su parte, el presidente del parlamento canario, Gabriel Mato, indicó que "hay que distinguir entre la inmigración regular, que siempre es bienvenida, y es una bendición, y la inmigración irregular". En Canarias, añadió, "de esta cuestión sabemos mucho, sin más, ayer llegaron nuevos cayucos, nuevas pateras y estamos a la espera de casi 2.000 nuevos inmigrantes procedentes de 30 ó 40 pateras que están en el mar".
"Los inmigrantes que vienen a Canarias para buscar otra tierra mejor que la suya no lo hacen voluntariamente, sino que lo hacen por necesidad, y de esa necesidad hay quien se aprovecha. Se trata de las mafias que comercian con seres humanos, ése es el factor más importante de la inmigración ilegal". Ante este hecho, dijo, "tiene que haber una contundencia no sólo de las asambleas legislativas, sino también del gobierno de España y de la Unión Europea".
"ANDAR CON MUCHO CUIDADO"
Por otro lado, Bonelli, interpelado por si compartía las reflexiones que realizó ayer el sociólogo Amando de Miguel en las que relacionaba los casos de violencia doméstica contra las mujeres que se producen en España con la inmigración, afirmó que "hay que andar con mucho cuidado con este tema, no tomar prescripciones por hechos sociales", y añadió que la violencia de género "se está destapando poco a poco" y que en los próximos años "subirá de forma tremenda porque se va a saber mucho más que anteriormente".
Al respecto, Julio de España indicó que "ni comparto ni dejo de compartir su opinión, lo que soy es fedatario de que esta cámara es el parlamento garante de la libertad de expresión de todos, algo que es positivo", al tiempo que matizó que se guardaba en su foro interno lo que pensaba porque "como presidente debo ser muy cuidadoso y muy responsable del puesto que ocupo".
Señaló que De Miguel "no intentaba convencer a nadie", y es "importante que seamos capaces de oír a todo el mundo y, en función de la madurez y de la capacitación de cada cual, asumamos lo que dicen las personas", apostilló.
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