El grupo valenciano Rover Alcisa acorta el plazo de construcción de un tramo del AVE instalando talleres en la obra

Actualizado: miércoles, 6 mayo 2009 19:29

VALENCIA, 6 May. (EUROPA PRESS) -

El grupo valenciano Rover Alcisa logró acortar los plazos de ejecución de un viaducto de 1.056 metros de la plataforma del nuevo acceso ferroviario de Alta Velocidad de Levante realizando la construcción 'in situ' instalando talleres a pie de obra y sin utilizar materiales prefabricados, según informó en un comunicado la compañía.

La empresa se ocupó de la construcción del viaducto más largo en la construcción de la Plataforma del Nuevo Acceso Ferroviario de Alta Velocidad de Levante entre la Comunidad de Madrid-Castilla La Mancha-Comunidad Valenciana y Región de Murcia en el tramo Torrejoncilllo-Abia de la Obispalía de 7 kilómetros de longitud.

El tramo Torrejoncilllo-Abia de la Obispalía, que se ha realizado en "tiempo récord", desde julio de 2008 hasta marzo 2009, trabajando durante 24 horas, con turnos alternativos, ha supuesto la construcción de 1.888 metros lineales de estructura postesada 'in situ' y la generación de 350 puestos de trabajo directos e indirectos, según las mismas fuentes.

Los viaductos y los falsos túneles han sido las unidades más relevantes suponiendo el 80 por ciento de la obra. En concreto, el viaducto de Higueruelas, de 1.056 metros de longitud, constituye el más largo del AVE de Levante, a los que hay que añadir la construcción de tres viaductos más cada uno de ellos de 11, 92 y 629 metros.

Además, Rover Alcisa realizó también con la construcción de dos falsos túneles, el de Higueruelas de 298 metros, incluidas las boquillas de entrada y salida, y el falso túnel de Alto Molino, de 323,50 metros, incluidas también las boquillas de entrada y salida.

La Compañía también destacó los rendimientos obtenidos por parte del equipo profesional que ha realizado 316 metros lineales de tablero terminado al mes, lo que supone la construcción de dos pilares por día. Par ello se montaron talleres en obra para el montaje de ferralla y encofrado, que en condiciones habituales vienen ya montados. Esto posibilitó un "óptimo control en la ejecución y una mayor dosis de flexibilidad", señalaron las mismas fuentes.