El Instituto de Restauración recupera el estandarte bordado del Palau de la Generalitat

VALENCIA 5 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Instituto de Conservación y Restauración de Bienes Culturales ha restaurado el estandarte bordado del Palau de la Generalitat. La pieza, de autor desconocido, data del siglo XIX, posiblemente entre 1835, fecha de creación definitiva de las Diputaciones Provinciales, y 1868, final del reinado de Isabel II, según informaron fuentes de la Generalitat.

El estandarte tiene forma rectangular y está confeccionado a partir de tres caídas de tafetán de seda color marfil y con la vaina dispuesta en el lateral derecho. Fue bordado a doble cara con técnica de bordado al pasado utilizando sedas policromadas sobre un tafetán también de seda. En el centro se disponen las armas reales completas de los Borbones enmarcadas por el collar de Toisón de Oro y rodeando a este él de la Orden de Carlos III, todo rematado por una corona real.

Por su parte, en los laterales del escudo se disponen varias banderas azules y rojas y, sobre estas últimas, se observa en la derecha el escudo de la ciudad de Valencia y en la izquierda el emblema 'Y2', posible alusión a Isabel II. En la parte inferior del escudo se disponen a derecha e izquierda dos ramas que cruza su tallo en el centro y diversas armas, como hachas, sierra, palas y bayoneta calada. En las cuatro esquinas se dispone un yelmo con escudo barrado con la leyenda 'prov.l de val.a nº.41' .

La pieza sufrió una intervención anterior, aunque se desconoce cuando se produjo ésta. En esa ocasión, le aplicaron un tul y posteriormente un zurcido con hilo de seda que pretendía reforzar las urdimbres perdidas sobre todo en el tercio inferior. La vaina también fue sustituida posiblemente en ese momento.

El estado de conservación del estandarte era muy deficiente. Presentaba graves daños en el 50 por ciento del tejido de base donde se observaban "graves lagunas, pérdidas de urdimbre que desligan las tramas, rigidez por desecación de las fibras, contracciones del tejido que han generado cortes, grietas y los zurcidos en zonas puntuales".

Además, presentaba suciedad generalizada con algunas acumulaciones puntuales de polvo blanquecino, pequeños puntos negros y restos sólidos. Las manchas provocaron graves daños tanto estéticos como en la estructura física y química de la fibra.

DOBLADA Y ARRUGADA

La presencia de humedad que afectó a la pieza unido a la forma en que estuvo almacenada, posiblemente doblada y muy arrugada, ha hecho que los sangrados de los colores no sólo afecten al área colindantes si no también al resto del tejido, indicaron las mismas fuentes.

El Instituto de Restauración en un primer momento procedió a la documentación técnica y fotográfica para poder realizar los mapas de deterioro e intervenciones anteriores. Se hizo también un calco del reverso en el que se marcaron los perímetros de los fragmentos, su ubicación y el diseño general.

Al llegar el estandarte con el reverso visto se pudo proceder a eliminar el tul y los zurcidos cortando cada punto y extrayéndolo con las pinzas. El proceso fue muy largo y laborioso ya que los puntos del zurcido eran minúsculos y el estado de la seda era muy deficiente. La vaina fue también desmontada pues se observó que no era un elemento original.

Antes de proceder al alineado --humificador de ultrasonidos--, se le dio la vuelta al estandarte de forma que el proceso de alineado ya se hizo por el anverso y sobre el calco para realizar una correcta reubicación de los fragmentos. Debido al deficiente estado de conservación se planteó sacrificar una cara de la pieza y trasladarla sobre un soporte 'cama blanda' y protegido mediante sándwich de crepelina, donde podrá reposar y ser expuesto en vertical.

La pieza ha quedado fijada mediante costura al soporte y protegida por la crepelina con líneas de sujeción que se disponen alternadas en toda la superficie.