Lozano promete respetar el pluralismo al frente del CVC en una toma de posesión con críticas por haber sido "impuesto"

Pleno extraordanario de toma de posesión de José María Lozano como presidente del CVC
Pleno extraordanario de toma de posesión de José María Lozano como presidente del CVC - ROBER SOLSONA/EUROPA PRESS
Publicado: martes, 15 abril 2025 13:56

   Un consejero asegura que el 80% de la institución ve su nombramiento como un "agravio", mientras Rovira defiende su prestigio

   VALÈNCIA, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

   José María Lozano ha tomado posesión este martes como presidente del Consell Valencià de Cultura (CVC), tras su nombramiento la semana pasada por parte del 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, con la promesa de intentar llegar a acuerdos en el seno de la institución, de velar por la imparcialidad y de respetar el "patrimonio cultural y lingüístico", frente a las críticas de otros consejeros de haber sido "impuesto".

   El pleno extraordinario del CVC, en el que Lozano ha estrenado su mandato al frente de la institución, ha contado con la asistencia del conseller de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira, la secretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, y la directora general de Patrimonio, Marta Alonso, además de invitados como el rector de la Universitat Politècnica de València (UPV), José E. Capilla, o el concejal de Cultura de València, José Luis Moreno.

   Lozano, que releva a Dolors Pedrós, ha manifestado que intentará "estar a la altura" de sus predecesores y que no piensa iniciar "un proceso de reacción, involución o cancelación", sino que "la búsqueda de acuerdos y consensos será permanente". "Quedan desde este momento tendidos los puentes", ha aseverado.

   En esta línea, ha garantizado que tratará de "evitar la discordia y los motivos de controversia para priorizar la unanimidad y la mayoría razonable, respetando la libertad de expresión que amparan los votos particulares", con la "firme disposición" a buscar "un diálogo permanente".

   Se ha marcado como objetivos dotar al CVC "de mayor seguridad jurídica, para evitar interpretaciones que pudieran resultar alejadas de la legalidad más estricta", y "potenciar la figura de la directora gerente". "Procuraré no defraudar sus expectativas", ha dicho ante el pleno, y ha dirigido este mensaje al 'president' de la Generalitat.

   Además, Lozano ha puesto en valor el trabajo de Dolors Pedrós como presidenta del CVC al considerar que, por encima de sus "discrepancias", todo lo que ha hecho o dejado de hacer durante su mandato ha sido "en beneficio de la institución". Y en general se ha mostrado "honrado, muy satisfecho y comprometido con la sociedad valenciana en su conjunto".

   En su intervención, el conseller Rovira ha afirmado que este es un "día positivo" porque el nombramiento de la presidencia del CVC estaba pendiente --Pedrós ejercía en funciones hasta ahora-- y la Generalitat "decidió efectuarlo". "Creo que ha recaído en la persona adecuada", ha dicho, destacando que Lozano lleva más de diez años como consejero del CVC y que "es una persona de lo que diríamos de reconocido prestigio".

   "Deseo que sigáis trabajando como hasta ahora; sin interferencia ninguna, lógicamente, como todo órgano estatutario, de nadie del gobierno, lógicamente", ha manifestado el responsable de la política cultural del Consell. Por último, ha deseado a Lozano "un magnífico trabajo de aquí en adelante".

"PRESIDENTE IMPUESTO"

   Tras la intervención del conseller ha tomado la palabra el consejero del CVC Gerardo Muñoz, quien ha denunciado que "por primera vez se ha impuesto un presidente" en la institución "sin el consenso de todas las fuerzas políticas de Les Corts", algo que ha asegurado que opinan "14 de los 18 consejeros, casi el 80%". También ha criticado que la secretaría autonómica les pidió su opinión respecto al nombramiento "de manera muy poco cortés, por correo electrónico y con 48 horas" de antelación.

   Muñoz, quien ha seguido hablando a pesar de que Lozano ha intentado cortarle con un "muchas gracias", ha indicado que no cree que sea "la persona más adecuada para presidir esta institución", mientras ha recordado que el resto de consejeros fueron elegidos por "una mayoría bastante cualificada" de Les Corts. "Nos sentimos anfitriones de esta casa, temporalmente, y nos gustaría que los invitados supieran nuestra opinión, no solo la del señor que ha sido impuesto por el presidente", ha subrayado.

   Ha lamentado así que la Generalitat no haya "hecho caso" a su petición de intentar "llegar a un entendimiento para que pudiera haber otras candidaturas" en lugar de la "impuesta" de Lozano. "Nos sentimos despreciados por parte de la Conselleria de Cultura", ha denunciado en este punto, y ha advertido que el equipo de Rovira está "actuando con desprecio hacia la cultura en general, hacia el valenciano y hacia el CVC".

   Es más, ha augurado que el nombramiento de Lozano "condena a esta institución a una vía de confrontación y, probablemente, de paralización porque el presidente no podrá sacar adelante ninguna iniciativa sin el acuerdo y el apoyo del pleno".

ROVIRA DEFIENDE EL NOMBRAMIENTO

   Seguidamente, Rovira ha pedido contestar a este consejero. Según ha expuesto, el actual Consell ha intentado renovar los órganos estatutarios desde que entró a gobernar a mediados de 2023, pero "no ha sido posible", por lo que tomó la "potestad" que le otorga la legislación de nombrar a un presidente del CVC entre sus vocales, "pensando en el beneficio de la institución". "Y así hemos actuado", ha recalcado, para reiterar el "prestigio propio" de Lozano que "se ha ganado con muchos años de trabajo y capacidad".

   El conseller también ha cargado contra el consejero Gerardo Muñoz, que fue propuesto por Ciudadanos cuando tenía representación parlamentaria: "Usted entró de vocal por un partido que ya no existe, con lo que debería ser de las personas menos indicadas para hablar. Lo normal sería dimitir e irse a su casa, pero cada uno toma las decisiones que toma personalmente".

   Tras estas palabras, Muñoz ha intentado replicar a Rovira, pero el nuevo presidente del CVC ha pedido "que le retiren el micro porque no está en el uso de la palabra", con lo que se ha dado por concluido el pleno extraordinario.

   El CVC, tras la salida de las autoridades, ha iniciado el primer pleno ordinario del mandato de Lozano, quien ha rogado a los consejeros que le "permitan el beneficio de la duda" antes de juzgarle.

PRIMERAS REUNIONES

   En su intervención inicial, el presidente ha avanzado que se reunirá con los rectores de las universidades públicas y con los responsables de las instituciones culturales valencianas, entre ellos el presidente de Fundación Bancaja, Rafael Alcón, y el del Museo de Bellas Artes de València, Pablo González Tornel.

   El presidente del CVC ha explicado que visitará todos los museos de la Comunitat Valenciana, también los de Alicante y Castellón, y entre ellos ha defendido la necesidad de que el Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí reciba una financiación acorde a su relevancia. También ha destacado que este miércoles recibirá la visita de la alcaldesa de València, Mª José Catalá.

   Por su parte, la consejera Ana Noguera ha mostrado su apoyo a las críticas de Gerardo Muñoz y ha lamentado que el conseller no se haya quedado al pleno ordinario en su "primera visita" al CVC. Noguera ha instado a Lozano a aclarar a Rovira el carácter de los órganos estatutarios: "Nunca hemos sido un correveidile de ningún gobierno: hemos actuado con nuestro propio criterio y lo seguiremos haciendo".

El también vocal José Vicente Navarro ha acusado a PSPV y Compromís de intentar bloquear la renovación de los consejeros del PP que, como él, tienen el mandato caducado, y ha destacado que Lozano vaya a "visitar" las sedes de la RACV o Lo Rat Penat.

Después de otras intervenciones, algunas en contra y otras a favor, Lozano ha señalado que no le corresponde decir si fue nombrado con la "fórmula adecuada"; que estudiará si "se han ido acumulando recortes presupuestarios" al CVC, que este año ve justificado por la dana; que no piensa dejar "recaditos" al conseller, y que tanto la RACV como Lo Rat Penat "son instituciones históricas con presencia permanente en la cultura valenciana".

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