VALENCIA, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las madres y padres de la Federación de Madres y Padres de Alumnos de la provincia (FAPA-Valencia) que tienen sus hijos en Secundaria plantearán al Síndic de Greuges, Bernardo del Rosal, y al director territorial de Cultura, Educación y Deporte, Camilo Miró, "las deficiencias de la construcción de los institutos", que, aunque "estéticamente muy cuidados, no se ha llevado a cabo con materiales resistentes", lo cual supone "continuos desperfectos que provocan elevados gastos de mantenimiento".
Según sostiene FAPA-Valencia, "la financiación de los institutos ha aumentado un 48 por ciento en los centros concertados, mientras que la de los públicos se mantiene cuando algunos nuevos institutos tienen gastos adicionales por las características de las nuevas construcciones, a las que, por ejemplo, se colocan vidrieras gigantescas, preciosas, pero que obligan a contratar para su limpieza a escaladores".
Asimismo, las madres y padres plantearán al Síndic "los problemas que envuelve la cuestión de la titularidad de los nuevos institutos", puesto que "aunque ya estén funcionando, la propiedad todavía es de Ciegsa, la empresa constructora". "Lo que impide reclamar a la conselleria cuando surgen deficiencias, como ha ocurrido en el IES número cuatro de Mislata", lamentaron.
"Otro caso es el del IES de Bunyol, otro instituto nuevo donde nunca ha funcionado la calefacción y todavía utiliza la luz de obra", apuntaron, por lo que la solicitud de FAPA-Valencia es que los centros se entreguen "con todo en regla".
Asimismo, otra cuestión que preocupa a los padres son los planes de evacuación de los centros de Secundaria, que, afirmaron, "necesitan una revisión".
Además, FAPA-Valencia reclamará tanto a Bernardo del Rosal como a Camilo Miró "la necesidad de que haya un comedor también en los institutos, incluso cuando hay jornada continua, porque los jóvenes llegan a casa a las 4.00 de la tarde y comen entre horas cualquier cosa lo que influye negativamente en su alimentación".
Para esta asociación, es igualmente importante "el papel de los conserjes", por lo que solicitarán "un aumento del número de conserjes", que, sostuvieron, "deben tener una preparación especial al estar en un lugar donde los jóvenes están formándose". La contratación de bedeles y conserjes no depende de la Conselleria de Educación sino de Función Pública, y lo que las madres y padres detectan es "una falta de coordinación entre estas dos entidades".
También preocupan a los tutores las bajas de los profesores en Secundaria que, apuntaron, "son muy elevadas", por lo que "los chicos y chicas pierden muchas horas y esto afecta a la calidad de su educación".
Por lo que se refiere a los transportes, estos padres y madres critican que "sólo hay autobús público hasta los cursos de ESO", de modo que "aquellos jóvenes que estudian Bachillerato tienen que pagarse el transporte hasta el centro o bien sus padres se ven obligados a tener que llevarlos o pagarles un taxi". "En los Acuerdos de Bolonia se planteó que en 2010 la tasa de personas que tienen el título de bachillerato tiene que llegar al 65 por ciento --hoy se sitúa en un 30 por ciento--, por lo que es vital que se facilite el acceso en todos los sentidos a estos estudios", aseveraron.
En esta línea, FAPA-Valencia también criticó que el seguro escolar de los jóvenes "sólo cubre hasta primero y segundo de ESO", una medida que aseguraron "permanece desde cuando existía EGB". "Ahora no tiene sentido que exista porque los alumnos están cubiertos por la seguridad social que es universal para todos", apuntaron.
Por último, las madres y padres de FAPA-Valencia denunciarán que "la línea en valenciano desaparece cuando los jóvenes llegan al instituto debido a que en Secundaria no se da la catalogación lingüística". Por este motivo, explicaron que "cuando se dan las clases en valenciano es porque los profesores así lo deciden y hacen el esfuerzo de hacerlo correctamente, ya que no se exige saber valenciano para impartir clases en ningún caso en Secundaria".
