VALENCIA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
La conselleria de Bienestar Social desarrolla un nuevo programa experimental en el ámbito de la reeducación de menores consistente en actividades de voluntariado con personas mayores residentes en centros de tercera edad por parte de jóvenes con medidas judiciales en régimen semiabierto y en régimen cerrado con salidas autorizadas.
La consellera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, señaló que el centro de reeducación Mariano Ribera en Burjassot (Valencia) realiza este programa de actividades desde el pasado mes de mayo con salidas a la residencia de tercera edad Instituto Geriátrico Valenciano, situada en el barrio valenciano de La Malva-rosa. En grupos de cuatro, han participado hasta la fecha un total de 12 jóvenes. La responsable del departamento avanzó que esta experiencia se trasladará y ampliará a otros centros de reeducación en función de la evolución y de los resultados que se obtengan en esta primera experiencia. Alicia de Miguel resaltó que los primeros resultados ofrecen "una mejora significativa, en cuanto ayuda a fomentar la empatía de los jóvenes hacia los problemas de las personas de más edad" y que también se aprecia "una mejora en su autoestima en cuanto se consideran personas más útiles".
Para De Miguel, el objetivo de este programa y otros desarrollados por el Consell, es "dar respuesta a las necesidades de integración de los jóvenes con especiales dificultades como son los jóvenes infractores internados en los centros de reeducación".
Las actividades realizadas por los jóvenes en el centro geriátrico se centran en acciones de ayuda y apoyo a los ancianos residentes en materia de ocio tales como tertulias, acompañamiento a las personas con dificultad, juegos de mesa, conversaciones y compañía.
Según destacó De Miguel, con esta iniciativa se favorece en los menores su proceso de maduración y crecimiento personal, se fomenta la solidaridad hacia otros colectivos desfavorecidos, se incentiva su compromiso social y se mejora la autoestima personal.
Asimismo, la consellera señaló que las personas mayores resultan también beneficiadas con las visitas de los jóvenes "puesto que mediante relaciones afectivas disminuye su aislamiento, se reduce la inactividad y mejoran su estado anímico".
Este programa de actividades se enmarca en las salidas educativas que los profesionales de los centros de reeducación de la Generalitat programan y lo desarrollan jóvenes voluntarios de entre 16 y 19 años internos en el centro Mariano Ribera y también menores a los que la autoridad judicial les ha impuesto la medida de prestaciones en beneficio de la comunidad y medidas de tareas socioeducativas.
