VALENCIA, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
La coordinadora de la Fiscalía de Menores de Valencia, Teresa Gisbert, afirmó hoy que "el número de delitos y agresiones en menores de 14 años ha aumentado en un 30 por ciento en la Comunitat en los últimos cinco años" y pidió "prevención, reeducación y una asignatura curricular para acabar con el acoso escolar".
Gisbert realizó estas declaraciones durante la presentación de la conferencia, 'La violencia juvenil: una visión de la Fiscalía de Valencia' enmarcada en el seminario 'Tres retratos de violencia: hijos tiranos, alumnos violentos y bandas juveniles. Reflexiones y prácticas para la prevención' que se está impartiendo en la Universidad Menéndez Pelayo de Valencia (UIMP). Al respecto, destacó que "los niños viven en una sociedad cada vez más violenta, no sólo en la calle, sino también en el trabajo, en el deporte y en las relaciones sexuales".
"Es una sociedad --dijo-- que admite la violencia en su seno y la admite como una forma de relación". Así, indicó que desde la fiscalía se plantean tres temas fundamentales; por un lado, "el aumento de malos tratos de hijos a padres, la violencia en las aulas, el llamado acoso escolar y el aumento de las agresiones sexuales en niños que ni siquiera han cumplido los 14 años".
Además, afirmó que la memoria de la Fiscalía de Valencia, que será remitida a la Fiscalía General, dice que "en 2001, el número de diligencias preliminares por agresiones y abusos sexuales fue de nueve, en 2002 de 12, en 2003 de 30 y en 2004 se situó en 27". Por otro lado, advirtió de que "las diligencias por malos tratos de hijos a padres realizadas por menores de 14 años, en 2001 se sitúa en seis, en 2002 en 10, en 2003 y 2004 en 22 y en 2005 en 37".
Asimismo, subrayó que "las diligencias preliminares por malos tratos de hijos a padres de menores entre 14 y 18 años fueron en 2001, 18 diligencias abiertas; en 2002 se contabilizaron 117; en 2003, 159; en 2004, 289; y en 2005, un total de 323". Por ello, explicó que ha habido "una progresión en cinco años, de 18 diligencias en 2001 a 323 que se contabilizan en 2005".
"Los malos tratos han existido siempre --comentó--, pero han aumentado mucho más porque la sociedad es más violenta y los jóvenes imitan esa conducta. Un caso de violencia en menores no es sólo una responsabilidad de los padres, todos debemos implicarnos: el Estado, las asociaciones y la sociedad", destacó.
Por otro lado, la fiscal hizo hincapié en que cada vez más las agresiones vienen dadas "por varones de 14 a 15 años que no suelen sufrir una patología, pero que sí existe un consumo de drogas, lo que les provoca una violencia desmedida". Al respecto, subrayó se da en "todo tipo de familias y niveles económicos" y que la proporción de comisión de delitos por sexos es de 10 hombres por cada mujer.
En cuanto a las adopciones internacionales, resaltó que "la violencia en hijos adoptados se da por el choque de culturas, el hijo no perdona la adopción y el padre esperaba algo más del niño", explicó Gisbert, quien también destacó que las "principales víctimas" de los malos tratos son "las madres, los hermanos y los abuelos".
ACOSO ESCOLAR
Teresa Gisbert dijo, en relación al acoso escolar, que "ha sido un fenómeno oculto, pero que ahora no hay término medio porque hemos pasado de que no existían a que ahora todo es acoso escolar". Además, indicó que "hemos dejado de ver el acoso como algo inevitable y debemos pensar que todo lo que ocurre con los niños es obligación de todos", aseveró.
"El acoso se da en niños cada vez más pequeños con síntomas como la angustia, la ansiedad, el temor, el terror, el absentismo, el fracaso escolar y la depresión". Pero, también subrayó que "uno de los motivos por los que se mantiene el acoso escolar es porque los educadores no lo denuncian y son los primeros que lo pueden hacer" ya que "tienen una serie de medios como la ley de protección de testigos, la oficina de ayuda a la víctimas de delito", subrayó.
La fiscal señaló una serie de medidas como la denuncia a la fiscalía, aunque también, en su opinión, "deben intervenir el colegio y la familia". Además, explicó que se puede intervenir con carácter cautelar y "obligar al menor a presentarse ante una citación judicial, además de otras medidas como el internamiento, la libertad vigilada o la convivencia con otra familia o grupo educativo".
Por otro lado, afirmó que en Valencia hay innovaciones como la Escuela de Padres que es "un proyecto hecho realidad que ayuda y supone dar a los padres las habilidades suficientes para saber cómo manejar y ayudar a los hijos" y "a los hijos a establecer una situación de afectividad familiar".
Además, Gisbert apuntó que es "muy importante la mediación porque permite al menor responsabilizarse de su conducta" y "le hace ponerse en el lugar del otro", al tiempo que remarcó que "la mediación está funcionando bien porque hay veces que en las familias es lo que hace falta", concluyó.