Pequeños agricultores y ganaderos rechazan cambiar el reglamento sobre pago único "por perjudicar al olivar tradicional"

Actualizado: viernes, 17 noviembre 2006 16:10

VALENCIA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos del País Valencià (UPA-PV) manifestó hoy su rechazo ante la nueva modificación del Reglamento 1782/2003 que podría ser aprobado en el próximo Consejo de Ministros de la Unión Europea y que "afecta de forma directa al sector olivarero español y valenciano, con especial intensidad a los olivareros tradicionales", según informaron fuentes de la organización a través de un comunicado.

La UPA-PV se refirió en estos términos a la modificación del Reglamento 1782/2003 que establece que aquellos productores que han generado derechos de pago único podrán activarlos a través de olivares plantados con posterioridad al 1 de mayo de 1998.

Para los pequeños agricultores y ganaderos de la Comunitat, esta medida "perjudica de forma clara a los olivares tradicionales valencianos que ven como plantaciones más modernas y más intensivas se benefician, con la nueva modificación de las ayudas europeas, creando un agravio comparativo frente a los olivareros que llevan trabajando desde siempre en el sector", resaltaron.

Así, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos consideró que "no se puede poner en peligro la viabilidad de las explotaciones tradicionales por una pretendida simplificación del sistema" y denunció que "esta es la primera batalla de la simplificación de la Política Agraria Comunitaria (PAC)".

En este sentido, afirmó que "hasta ahora, la normativa comunitaria ha sido muy estricta respecto a evitar utilizar importes de pago único a favor de producciones permanentes u hortícolas. Si esta propuesta se consuma --advirtió-- no será sólo el olivar el que sufrirá la presión de nuevas producciones generadas a partir de importes de referencia provenientes de otros sectores, como el sector de las frutas y hortalizas que se verá distorsionado por esta medida".

Por ello, UPA-PV pidió a la Administración que analice las consecuencias "claramente negativas que, en un primer momento, van a tener para el sector olivarero y luego para el resto de sectores productivos estratégicos nacionales" este tipo de iniciativas de la Comisión Europea, por lo que le exigió "que las rechace".