VALÈNCIA, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha garantizado este domingo en la 32 Trobada d'Escoles en Valencià que el Consell "no va a dar ningún paso atrás en política lingüística" y ha defendido el nuevo decreto de plurilingüismo impulsado por el conseller de Educación, Vicent Marzà, "muchas veces interpelado desde la mala fe".
"Ayer, algún representante político --en referencia al eurodiputado del PP Esteban González Pons-- decía que no abriéramos la tele y acabáramos con los barracones. Yo digo: acabaremos con los barracones y tendremos tele y radio pública en valenciano porque los valencianos nos lo merecemos", ha reivindicado el 'president' en el encuentro en Guadassuar organizado por Escola Valenciana, al que también han asistido el propio Marzà y el titular de las Corts, Enric Morera.
Tras agradecer a los participantes en la Trobada su "lealtad al pueblo valenciano" y expresar su emoción por ver las calles "llenas de alegría", Puig ha insistido en que este tipo de encuentros "solo interpretan el canto de todo un país, nada más"
"Porque el valenciano y creer en nuestra tierra es un síntoma de alegría: los valencianos estimamos nuestra tierra, nuestra lengua y nuestra identidad, y eso es motivo de alegría"; ha manifestado.
Para el jefe del Consell, éste "es un día de felicidad, de enaltecer lo que es fundamental para un país: la educación". Por ello, ha agradecido a los profesores su trabajo, "los que dan oportunidades a los jóvenes que tienen que tener un proyecto de vida basado en valores que compartimos".
Sí ha reconocido la existencia de "problemas" en la Comunitat Valenciana en materia de educación por la falta de financiación suficiente para "ir más deprisa". "Queremos ir más deprisa a pesar de todas las insuficiencias", ha aseverado.
En definitiva, "hacer de la lengua un espacio de unidad y unión entre valencianos, no de discusión y soberbia por parte de nadie".
MARZÀ, "INTERPELADO DESDE LA MALA FE"
Con esta meta en el horizonte, Puig ha lamentado que el conseller Marzà, tras dar luz verde al decreto plurilingüe, "muchas veces está absolutamente interpelado desde la mala fe".
"Lo único que queremos es que los niños sepan castellano, valenciano e inglés y tengan oportunidades. ¿Por qué les molesta tanto a algunos dirigentes que los niños tengan la misma capacidad?", se ha preguntado, para recalcar que "la política lingüística del conseller es la de la Generalitat" y advertir: "No vamos a dar ningún paso atrás en la política lingüística de los valencianos".
Para conseguirlo, el 'president' ha citado el ejemplo del profesor valenciano Manuel Sanchis Guarner, que "era moderado y poco radical y aun así apostaba por avanzar en la lengua teniendo en cuenta la pluralidad y todas las miradas". "Pero la diversidad es también nuestra fuerza", ha zanjado.
