MURCIA, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
El director general del Agua, Miguel Ángel Ródenas, aseguró hoy que la derogación del trasvase del Ebro "no se fundamenta en razones técnicas, ni económicas ni medioambientales, sino en el nacionalismo y en el ecologismo radical".
Ródenas, quien hizo estas declaraciones en el marco de unas jornadas organizadas por la Fundación Agua y Progreso de la Comunitat Valenciana, afirmó que "hay agua en el río Ebro, hay agua de sobra y hay proyecto que es el que permitiría resolver nuestros problemas hídricos". "Lo único que no hay en estos momentos es voluntad política, pero las voluntades políticas se doblegan", aseveró.
En esta línea, el responsable de Agua de la Región destacó que ese trasvase del Ebro "es la pieza más importante de la planificación del agua en España y en particular, para el Levante y el Arco Mediterráneo", según fuentes de la secretaría general de la Presidencia y Relaciones Externas.
De igual modo, explicó que la importancia del trasvase del Ebro reside en el hecho de que "supone que una pequeña parte de agua que discurre por nueve comunidades autónomas de España solucione un gran problema del déficit hídrico de otras comunidades de España" tales como Valencia, Murcia y Almería, "es decir, agua de España para España".
Al respecto, Ródenas incidió en la coincidencia de la mayor parte de la sociedad valenciana en que "es necesario retomar cuanto antes este proyecto de trasvase del Ebro porque las medidas planteadas por el Gobierno hasta ahora no son suficientes".
Asimismo, recordó que la desolación "no es la solución para la agricultura porque es muy cara y consume mucha energía". En este sentido, el responsable de Agua consideró que "persistir sólo en políticas de desalación es persistir en el error y estamos perdiendo el tiempo".
PROYECTO DE COHESIÓN.
Durante el transcurso de estas jornadas que se desarrollan en Valencia y en las que el director general del Agua se ha reunido con los regantes de la Comunidad Valenciana, del canal del Turia, del Vinalopó, del río Mijares y con usuarios de la Cámara de Comercio, se destacó la importancia del trasvase del Ebro a la hora de solucionar el déficit hídrico de algunas comunidades como Murcia y Valencia.
En este sentido, todos coincidieron en que el trasvase del Ebro "es un proyecto de cohesión y de colaboración entre territorios de España; un proyecto demasiado bonito para los que no creen en la idea de España". "Esta es la razón principal de los ataques desproporcionados que ha sufrido este proyecto del Ebro y es el principal motivo de su derogación", resaltó.
El director general del Agua puso de manifiesto durante su ponencia, titulada 'Trasvases y desalación. Tiza y Pizarra', que el Plan Hidrológico de 2001, en el que se incluía el trasvase del Ebro, "supuso la culminación de un proceso de planificación hidrológica como nunca lo ha habido en España".
Ródenas hizo hincapié en el hecho de que los regantes de toda la cuenca del Ebro "se mostraron favorables al trasvase porque les permitía realizar numerosas inversiones en su zona", al tiempo que concretó que el agua del Ebro "permitiría dejar de utilizar unos pozos sobreexplotados que podrían ir recuperándose y volver a fluir en los manantiales".
Por último, Miguel Ángel Ródenas destacó que las Naciones Unidas establece, en el informe 'Agua para todos, agua para la vida', que "disponer de menos de 1.000 metros cúbicos al año es insostenible y las cuencas del Segura y del Júcar están por debajo de estas cifras".
