Sáez Merino recurre al concurso de acreedores para reorganizar el grupo y salvar su continuidad

Actualizado: miércoles, 1 febrero 2006 19:41

VALENCIA, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

El grupo textil Sáez Merino se ha sometido a un concurso de acreedores con el fin de "negociar su pasivo y poder acometer un Plan de Reorganización capaz de garantizar la continuidad de la empresa" y poner fin a una situación de "pérdidas" que se remonta a 2004, según informaron hoy fuentes de la firma valenciana.

El proyecto se basa en "potenciar el comercio de las marcas Lois, Cimarron, Caroche y Caster", relegando a un segundo plano la producción, ante la "imposibilidad" de reducir sus costes. De este modo, la explotación comercial de las marcas se convierte en el "primer recurso del grupo para competir con productos asiáticos de mano de obra barata", explicaron.

La firma ya intentó "contrarrestar" esta competencia de las economías "emergentes" con la subcontratación de parte de su producción en países del norte de África. Al respecto, afirmaron que esta iniciativa, que ya "salvó de la crisis a grandes firmas internacionales", ha tenido efectos "positivos" inmediatos en el Grupo Sáez Merino, tras su aplicación el pasado año.

Sin embargo, apuntaron que el despido de 542 trabajadores, que representan casi un tercio de la plantilla, elevó hasta los 14 millones de euros de pérdidas el ejercicio 2005.

Asimismo, señalaron que el concurso de acreedores, como medida de control judicial, no se ha adoptado a instancia de ningún acreedor, sino que responde a una iniciativa propia del grupo "ante la imposibilidad de atender determinados pagos en las próximas semanas". En este sentido, indicaron que esta decisión se adoptó "después de que se frustraran tres meses de negociaciones con diversas entidades de crédito para financiar el Plan de Reorganización de la empresa".

El Plan de Reorganización del Grupo Sáez Merino se basa en una "apuesta centrada en el marketing, la comercialización y la distribución de las cuatro marcas, relegando la producción a un segundo plano", ya sea de prendas o de tejidos, resaltaron.

Para ello, se ha adoptado, entre otras medidas, el desarrollo de un canal de tiendas propias basadas en la marca, la ampliación del departamento comercial de exportación y la mejora en la red de ventas, tanto en recursos humanos como en formación.