Solbes apuesta por el rigor presupuestario y la inversión en I+D+i para afrontar el envejecimiento y reforma productiva

Actualizado: lunes, 6 noviembre 2006 17:09

VALENCIA, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, apostó hoy por aumentar el rigor en las política presupuestaria y la inversión en I+D+i como fómulas para afrontar los retos a largo plazo que deberá solucionar la economía española de envejecimiento de la población y agotamiento de las actuales fuentes productivas.

Estas son las claves que expuso durante la conferencia 'Los retos a largo plazo de la economía española' que impartió hoy en la Universitat de València invitado por la Facultad de Economía, de donde fue profesor, para conmemorar el 40 aniversario de su creación.

El acto congregó a una nutrida representación de la vida política, económica y universitaria valenciana como el conseller de Economía, Gerardo Camps, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, el presidente de Bancaja, José Luis Olivas, el presidente del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, Arturo Virosque, el secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, el rector de la Universitat, Francisco Tomás, la decana de la facultad, Trinidad Casasús, o el secretario de UGT, Rafael Recuenco, entre otros.

Solbes expuso en su intervención que la coyuntura económica actual es "positiva" con "unas cuentas saneadas sin precedentes" que ha generado una "confianza" en el empresariado y en los consumidores que han aumentado sus inversiones ya que se ha logrado "aumentar la prosperidad" de los españoles y "cubrir sus necesidades materiales".

Por ello, apuntó que la "principal preocupación" del Gobierno de José Luis Rodriguez Zapatero "no pasa por el futuro inmediato" sino por resolver los retos que presentará la economía a largo plazo que, a su juicio, se centran en los efectos que producirá el envejecimiento de la población y la necesidad de modificar el patrón productivo ante el agotamiento de sus fuentes actuales.

Así, explicó que el primer problema que deberá solventar la economía española a medio o largo plazo es el de los efectos presupuestarios en las pensiones o en los gastos sanitarios que provocará el envejecimiento de la población.

Al respecto, apuntó que sólo caben tres opciones: aumentar los impuestos, disminuir las prestaciones sociales o intensificar el rigor la política presupuestaria. Solbes mantuvo que aunque las tres medidas se pueden combinar, se decantó por seguir aumentando la disciplina en la política presupuestaria para que disminuya la relación de la deuda y el PIB y de este modo se aumente la estabilidad y la capacidad de maniobra.

REFORMA PRODUCTIVA

Del mismo modo, consideró primordial "complementar las fuentes productivas actuales" con otras que sean "más sostenibles y duraderas". En este punto, aclaró que la economía actual todavía disfruta de los beneficios de las reformas que se implantaron en las dos últimas décadas de una transición a una economía de mercado, una apertura al exterior o los fondos estructurales y de cohesión concedidos por la Unión Europea.

Sin embargo, advirtió de que se tratan de recursos "excepcionales ya agotados" cuyos efectos alivia en la actualidad la inmigración y las altas tasas de ocupación, pero que en cualquier caso "no pueden persistir en el futuro". Para Solbes, el "relevo" de estas fuentes productivas debe ser un incremento en la inversión en I+D+i que supondrá un "factor dinamizador en los próximo años".

En ese sentido, constató "las carencias" del sistema español en este ámbito con una inversión "claramente insuficiente" ya que si en España es del 1 por cinto del PIB, en UE es del 2 por ciento y en EEUU del 3 por ciento y, además, mayoritariamente privada. El ministro atribuyó este "retraso" en motivos sociopolíticos, como el miedo al riesgo, en la "escasa disponibilidad para la inversión capital-riesgo" y en un "circulo vicioso de la interacción entre los científicos y la empresa". No obstante, subrayó que este refuerzo en I+D+i y en la educación es "un elemento recurrente que no sólo no se agota", sino que "multiplica el potencial económico" y deriva en "un beneficio a la sociedad".

Por ello, recalcó la necesidad de aumentar este sector no sólo mediante un apoyo financiero que disminuya el coste con deduccciones fiscales, sino a través de una política global que frene y revierta 'la fuga de cerebros', intensifique los vínculos entre científicos y empresa y refuerce el sector del capital-riesgo que hoy, lamentó, "no está volcado con las etapas iniciales de investigación", así como la difusión de los valores de la investigación entre la población.

Justamente señaló que estos son los objetivos del plan Ingenia 2010 del Gobierno, cuya implantación destacó que lleva "buen ritmo", que persigue que en ese año la inversión alcance el 2 por ciento del PIB.

"Todavía hay que hacer unos esfuerzos adicionales pero profundizando en esta política de la mejora de la estabilidad presupuestaria y aumento en la dinamización del sector tecnológico se logrará mantener la bonanza económica a medio y largo plazo", apostilló.