La subdelegación refuerza los controles durante el fin de semana para detener a los asaltantes de Moraira (Alicante)

Europa Press C. Valenciana
Actualizado: viernes, 28 julio 2006 15:18

ALICANTE 28 Jul. (EUROPA PRESS) -

La subdelegada del Gobierno en Alicante, Etelvina Andréu, informó hoy del refuerzo "en toda la comarca de la Marina Alta" de distintos controles "en los accesos a distintos pueblos y urbanizaciones" por parte de agentes de la Guardia Civil, coordinados con la Policía Local, "para evitar que se vuelvan a producir hechos" como el robo con violencia ocurrido ayer jueves, 27 de julio, en Moraira (Alicante).

Durante la firma de un convenio entre la Dirección del Catastro y el Colegio de Gestores Administrativos de Alicante, Etelvina Andréu respondía así, a preguntas de los medios de comunicación sobre, el suceso ocurrido la noche de ayer en un domicilio de Moraira en el que se encontraban dos ciudadanos de origen luxemburgués. Al parecer dos personas entraron en la casa y agredieron a una mujer, de 65 años de edad, y a un hombre de 62 años, quienes resultaron heridos con un arma blanca en el tórax y el abdomen, respectivamente.

De esta forma, Etelvina Andréu dijo que "el equipo de la Policía Judicial de Calp está siguiendo el caso", y, según añadió, "desde primera hora de la mañana he dado instrucciones a la Comandancia para que desplace desde la Unidad Provincial todos aquellos recursos materiales y humanos" para intentar encontrar a los asaltantes en "el menor tiempo posible" y así, "desarticular cualquier tipo de actividad".

Además, según indició, "en toda la comarca de la Marina Alta" están previstos distintos controles "en los accesos a distintos pueblos y urbanizaciones" por parte de la Guardia Civil, coordinados con la Policía Local, "para evitar que se vuelvan a producir hechos de este tipo".

Por ello, Andréu quiso lanzar "un mensaje de tranquilidad", y según manifestó, "si fuera necesario pedir ayuda a la Comandancia de Valencia, lo haríamos para intentar encontrar a los dos asaltantes".

En esta línea, según comentó, el objetivo es "que se recobre la normalidad en una zona que llevaba un verano excelente con una bajada de delitos superior al 14 por ciento". No obstante, dijo entender que "un único suceso" como este es "suficiente para hacer que los ciudadanos estén intranquilos". "Esperamos que el dispositivo de este fin de semana sea suficiente para disuadir de actuaciones de este tipo", finalizó.

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