VALENCIA 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
La concejala del grupo municipal de Esquerra Unida del Ayuntamiento de Valencia, Maria Victoria González, aseguró hoy que "en estos momentos en la ciudad de Valencia hay más de 1.000 informes de protección del menor que están guardados en un cajón en la conselleria de Bienestar Social, sin que le den ninguna solución".
Asimismo, la edil de EU resaltó que "creemos que la concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento de Valencia, Marta Torrado, conoce de esta situación", por lo que, añadió, "creemos que debería exigir a la consellera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, que actúe rápidamente", ya que "no puede haber más de 1.000 casos sin resolver", apostilló.
Según señaló la concejala, de los más de 1.000 informes, algunos "llevan un año y medio de retraso, y otros están relacionados con situaciones de acoso y de violencia por parte de los padres".
Respecto a la situación de los centros de menores, Fernández recordó que en Valencia ciudad sólo hay uno de recepción, 'Monteolivete', y otro en Burjassot, y aseguró que estas infraestructuras son "totalmente insuficientes", por lo que exigió mayor inversión en relación con la protección del menor. En este sentido, señaló que en la ciudad haría falta el doble de plazas de las que existen actualmente.
Además, apuntó que en Valencia "cuando llega el verano algunos niños que están tutelados en los centros son enviados a casa porque los educadores se van de vacaciones y no son sustituidos, por lo que el menor debe volver a una situación de la que anteriormente ha tenido que salir por desamparo".
Asimismo, afirmó que la Ley de protección de Menor es muy clara, "y en otras cosas podemos tardar más, pero cuando se trata de un menor, hay que actuar rápidamente", por lo que reiteró que Marta Torrado debe exigir a la conselleria de Bienestar Social que actúe "rápidamente" en casos como el de los dos menores que fueron encontrados por la Policia Local en situación de desamparo hace dos días deambulando por la ciudad de Valencia y que finalmente, ingresaron en un centro de acogida adecuado a su edad , según confirmó ayer la conselleria de Bienestar Social.