Valencia.- Finalizadas las obras de limpieza, señalética y vallado en el Tossal de Sant Miquel de Llíria

VALENCIA 29 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Diputación de Valencia informó hoy de que las tareas de limpieza, señalética y vallado en el Tossal de Sant Miquel de Llíria ya han finalizado. Al respecto, destacaron que la colaboración de esta entidad junto con la Generalitat y el Ayuntamiento de Llíria, ha hecho posible que este yacimiento, "una de las grandes ciudades ibéricas del territorio valenciano que sucumbieron a principios del siglo II a.C. bajo la conquista romana", pueda visitarse dentro de los recorridos turísticos que ofrece este municipio, informaron fuentes de la Corporación provincial en un comunicado.

Dada la desprotección del yacimiento arqueológico y su continuo deterioro, "al ser constantes las agresiones tanto a las ruinas como a los carteles informativos", en 2007 se ha abordado definitivamente el vallado de la parte excavada y de las dos manzanas restauradas, obra que ha sido costeada íntegramente con 50.000 euros por la Dirección General de Patrimonio Cultural Valenciano de la Generalitat Valenciana.

"Y no podía ser de otra manera, la Llíria barroca, medieval y romana necesitaba mostrar, también, su pasado ibérico, su primera seña de identidad, Edeta, la opulenta ciudad edetana que, a través de sus vasos pintados y de sus ruinas, forma parte de las primeras páginas de nuestra historia", explicó la directora del Servicio de Investigación Prehistórica (SIP) de la Diputación de Valencia, que dirige anualmente las tareas de excavación y limpieza del poblado.

El Tossal de Sant Miquel de Llíria, identificado con la antigua Edeta a partir de las citas de algunos autores clásicos como Claudio Ptolomeo que la nombra en el siglo II a.C., es uno de los yacimientos arqueológicos "más emblemáticos" de la arqueología valenciana y, en especial, para el estudio de la cultura ibérica.

Desde 1933 y hasta 1953, el Servicio de Investigación Prehistórica de la Diputación de Valencia excavó unos 5.000 metros cuadrados del asentamiento, que cuenta con una superficie máxima de unas 10 hectáreas. Declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1992, ha sido objeto de diversas actuaciones de excavación y consolidación de las estructuras en el marco de un proyecto integral de puesta en valor.

En aquellas históricas excavaciones se identificaron varios barrios de viviendas a partir del estudio de 130 departamentos, un templo, además de las zonas abiertas y calles que organizaban un complejo trazado urbano organizado en terrazas.

Uno de los elementos arqueológicos más valorados del yacimiento lo constituye las famosas cerámicas pintadas con escenas figuradas. Los vasos con escenas de combates, cacerías, celebraciones festivas o religiosas muestran actividades propias de la aristocracia edetana, documentación de primera mano para interpretar la sociedad edetana. Esto hace del yacimiento un hito único en la arqueología ibérica, y un potente elemento de atracción para los futuros visitantes interesados en esta cultura.

En los años 1994 y 1997 se puso en marcha un proyecto de puesta en valor por parte del Servicio de Investigación Prehistórica y el M. I. Ayuntamiento de Llíria que contemplaba una serie de fases de consolidación y restauración de viviendas, así como el acondicionamiento de una senda con paneles explicativos.

Las dos terrazas restauradas "resultaron de una monumentalidad arquitectónica sin paralelos" en el mundo ibérico, ya que se conservan viviendas de varias plantas con paredes de más de cuatro metros de altura, escaleras, hogares y hornos domésticos" de una espectacularidad y estado de conservación únicos".

En este sentido, indicaron que desde 1997, las intervenciones en el asentamiento han continuado por parte de la Diputación de Valencia, aunque limitadas a la limpieza de vegetación y a un mantenimiento mínimo de las estructuras consolidadas.

En el año 2005 y 2006, el SIP, ante el deterioro de las estructuras restauradas, tuvo que intervenir de nuevo en las viviendas restauradas, se repusieron los paneles explicativos y se acondicionó el itinerario de acceso por un coste de 24.000 euros.

Tras las obras acometidas durante 2007 el yacimiento cuenta con la protección del vallado y la señalética para garantizar la conservación de las zonas excavadas.