VALENCIA 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
El teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Grau, señaló hoy que la amenaza de la contrata del consistorio que gestiona las multas de tráfico (Tribugest) de dejar de prestar servicio obedece a una "táctica de presión empresarial" por la convocatoria de un nuevo concurso del servicio y le advirtió al respecto de que si incumple sus obligaciones incurrirá en una "ilegalidad que será sancionada".
Grau respondió de esta forma, al término de una rueda de prensa para informar de los asuntos tratados en la Junta de Gobierno, a la amenaza de Tribugest, que ayer dio a conocer el grupo municipal de EU, con dejar de prestar servicio antes del 30 de septiembre si no se le pagan los 2,2 millones de euros que el consistorio le adeuda.
Al respecto, Grau enmarcó este ultimatum a una estrategia de "presión empresarial", que recalcó que "no tiene ninguna trascendencia", ante la convocatoria de un nuevo concurso para la adjudicación de este servicio.
No obstante, recalcó que esta advertencia está "absolutamente fuera de lugar" porque en el pliego de condiciones por el que se le adjudicó a Tribugest la gestión de las multas de tráfico establecía claramente que cuando finalice la concesión pero que hasta que el nuevo concesionario, que pueden ser ellos u otros, asuma el servicio la empresa tiene "contractualmente la obligación de seguir manteniéndolo".
Por ello, mostró su convicción de que la empresa "no va cometer la barbaridad de tirar piedras contra su propio tejado dejando de prestar un servicio que tiene la obligación legal de prestarlo porque eso sí que le supondría una sanción".