VALENCIA, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
El grupo municipal socialista denunció hoy que la rehabilitación de la Sala del Consulado de la Llotja, que constituye la intervención central de esta fase de restauración, va a quedar "inacabada" por la "cicatería presupuestaria y la falta de compromiso patrimonial" de la alcaldesa de Valencia Rita Barberà con este monumento declarado Patrimonio de la Humanidad.
Al respecto, el concejal Juan Soto afirmó que la techumbre del siglo XV del Consulado, procedente de la Cambra Daurada de la antigua Casa de la Ciutat, "ha quedado excluida de los trabajos de limpieza y restauración de esta sala".
Así, lamentó que la techumbre instalada en la Llotja por iniciativa del alcalde republicano, Ricardo Samper, en torno a los años veinte del siglo pasado "deberá esperar a otra nueva intervención para recuperar todo el esplendor y la belleza que el paso de los años ha ido ensombreciendo".
"No se trata --aseguró-- de una cuestión puramente estética ya que el alfarje de la Llotja en realidad se encuentra en mal estado por lo que requiere una intervención en profundidad con el objetivo de sanear y consolidar toda su estructura".
Soto considera además que el edificio de la Llotja necesita otras intervenciones con una inversión de, al menos, 2.000.000 de euros, inversión mínima que, en su opinión, "debería destinarse a además de a la techumbre del Consolat de Mar a la restauración completa del suelo de cerámica de Manises del XV de las planta primera de la torre que ha quedado oculto bajo una tarima de madera por decisión expresa de la alcaldesa".
Del mismo modo, señaló que la rehabilitación completa de la Llotja debería atender de manera prioritaria toda la estructura situada entre la cubierta exterior y el columnario, en la actualidad "muy deteriorada".
Finalmente, consideró "política y técnicamente prioritario que la rehabilitación de un edificio como éste tenga su Plan Director". "La decisión injustificada del Gobierno del Partido Popular de parchear hasta el extremo un proyecto que debería tener un alcance global e integral, produce situaciones tan absurdas como fraccionar en distintas fases la rehabilitación de una misma sala", explicó.
Por otra parte, recordó que el salón del Consolat de Mar estaba presidido desde los años veinte por el lienzo conocido como La inmaculada Concepción y los Jurados de Valencia, una obra de Jerónimo Jacinto de Espinosa que fue cambiada de lugar con motivo de la reinauguración del Museo Histórico.
En ese sentido, señaló que se trata de "otra pieza sometida al habitual baile trilero del patrimonio histórico municipal" ya que, rememoró, "en octubre de 2005 la pieza fue caprichosamente reubicada en el Museo Histórico Municipal junto a la Senyera y otras reliquias de la ciudad, desplumando de paso al Consulado de Mar".
Soto lamentó también que "Barberá no se haya podido resistir a aportar su toque hortera a la rehabilitación, en una clara demostración, una vez más, de caciquismo". "Gracias a su intervención una cortina azul impedirá que los valencianos contemplen la restauración de los ventanales góticos", recriminó.