Valencia.- Vecinos critican "el grave problema de participación y democracia" de la ciudad en un pleno alternativo

Europa Press C. Valenciana
Actualizado: viernes, 28 abril 2006 17:55

VALENCIA 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

Diversas asociaciones vecinales de Valencia criticaron hoy "el grave problema de participación y democracia" que existe en la ciudad en un pleno alternativo celebrado hoy en la plaza del Ayuntamiento de Valencia como protesta "por los problemas de los ciudadanos para poder acceder de forma habitual y normal al pleno municipal", indicó la portavoz de la plataforma de afectados por el hospital Virgen del Consuelo, María Dolores Canet.

En este sentido, un miembro de la plataforma cívica Salvem el Cabanyal, Rosa Moreno, explicó que cuando llegan al pleno del ayuntamiento "las pancartas de las personas afines al PP están ya puestas", de modo que, dijo, otros vecinos no tienen "un sitio para poner la pancarta" ni un espacio donde expresarse "libremente", apuntó.

Además del colectivo de afectados por el centro hospitalario y Salvem el Cabanyal, participaron en el acto organizaciones como Salvem Tabacalera, la Asociación de Vecinos de Patraix --afectados por la subestación--, el colectivo Pro Polideportivo Benicalap-Beniferri, la Plataforma por Ruzafa, Compromís Pel Territori y vecinos de La Punta, que expusieron "libremente y públicamente" sus reivindicaciones.

Miembros de Salvem el Cabanyal manifestaron que "el PP no se digna a ver los problemas que afectan a los vecinos o que están en contra de sus intereses". Así, criticaron que el plan urbanístico del Cabanyal, "que derriba 1.651 viviendas y obliga a desalojar a más de 1.200 familias", es "un proyecto especulativo que quiere quitar la vida y las casas a las personas para dárselas a las constructoras con el fin de hacer viviendas de renta libre que valen 100 millones de pesetas". Por este motivo, solicitaron la rehabilitación sin destrucción del barrio.

También sostuvieron que el ayuntamiento "ha utilizado herramientas mafiosas y ha llevado marginalidad y venta de droga al Cabanyal para romper la convivencia entre los vecinos". Añadieron que su lucha "no es política, sino sencillamente en defensa de los intereses, del patrimonio, de la salud y de los derechos de los ciudadanos que no son respetados".

Por su parte, desde la plataforma Pro Polideportivo Benicalap-Beniferri explicaron que aunque el Plan Director de Instalaciones Deportivas de 2000 tenía prevista la creación de un polideportivo público en el solar de Cortes Valencianas, se lo van a quitar "sin justificación alguna" para construir el nuevo estadio del Valencia C.F. y un centro comercial.

Al respecto, la co portavoz de esta plataforma, Irene Pérez, afirmó que al barrio "le han creado un gran problema porque nadie quiere que pongan un estadio de fútbol enfrente de casa y además, al lado van a construir un centro comercial y en esa zona ya están Nuevo Centro, Hipercor, Carrefour y Mediamark". También añadió que esta situación "muchos" problemas de saturación de tráfico, además de afectar al pequeño comercio.

"FACHADA ARTIFICIAL Y TURÍSTICA"

Asimismo, Jorge Picó, de la Plataforma por Ruzafa, señaló que "la actual política municipal aumenta el desequilibrio entre una fachada artificial y turística y unos barrios abandonados, inconexos y deficitarios de servicios públicos". Apuntó además que todos los ciudadanos han de participar "en pie de igualdad" en el diseño y atención de sus necesidades y prioridades.

La portavoz del colectivo de afectados del Consuelo, María Dolores Canet, criticó, por su parte, que el hospital nunca ha tenido licencia y que está metido en sus viviendas, que invade con "gases, ruidos infernales, explosiones y obras constantes". Por ello, solicitó que "sea clausurado y trasladado fuera del núcleo urbano a otro lugar más adecuado con la actividad que realiza".

Además, Canet señaló que pese a la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo que da la razón a los vecinos, les ha hecho sufrir "acoso psicológico, físico y moral" y que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, "en lugar de amparar a los vecinos, ha amparado al Hospital del Consuelo que está al margen de la legalidad".

En esta línea, un miembro de la Asociación de Vecinos de Patraix, Tomás Frutos, reivindicó el "derecho a la salud" de los vecinos de este barrio, ante la construcción por parte de Iberdrola "de una subestación de alto voltaje a escasos metros de las primeras viviendas que está alimentada por un cable de alta tensión que recorre las calles más densamente pobladas y que está a seis metros de los colegios".

Así, Frutos señaló que las radiaciones electromagnéticas provocan enfermedades "muy graves, como leucemia infantil", pero que esto no se ha tenido en cuenta. Además, añadió que ellos no están en contra de la subestación, sino "en contra de su ubicación, que está avalada por el ayuntamiento de Valencia".

También resaltó que entienden "que se puedan estar pagando favores", ya que "Iberdrola es patrocinadora de la America's Cup y paga un barco". Pero indicó que "sólo" piden que se cumpla "el principio de precaución por el que si una actividad de este tipo pudiera resultar dañina para la salud, se ubique en otro sitio".

FALTA DE VOLUNTAD

Por otra parte, el portavoz socialista del Ayuntamiento de Valencia, Rafael Rubio, expresó, antes de entrar al pleno del consistorio de hoy, su apoyo a los distintos colectivos y dijo que éstos "pretenden dejar muy claro la falta de voluntad por parte del equipo de Gobierno del PP de atender de una manera efectiva las reivindicaciones que están haciendo". En este sentido, apuntó que la solución a los problemas pasa por un "diálogo entre las partes" y acusó a la alcaldesa de utilizar la máxima "estás conmigo o estás contra mí" en su actuación política.

Además, Rubio calificó de "absurdo y excesivo" el despliegue policial que le hizo pensar que "podía haber una célula de Al Qaeda dentro del ayuntamiento". Así, manifestó que los concentrados frente al consistorio eran "absolutamente pacíficos", al tiempo que consideró que la Policía Local debía estar "resolviendo los problemas de tráfico en toda la zona del puerto".

El portavoz de Izquierda Unida del Ayuntamiento de Valencia, Antonio Montalbán, afirmó, por su parte, que "es un ejercicio sano de los movimientos sociales que se puedan realizar plenos alternativos" y añadió que es "necesario" que el tejido asociativo "vivo" de la sociedad valenciana con preocupaciones sociales, de urbanismo o medioambientales "se manifieste y llegue a la ciudadanía".

Al finalizar la exposición de reivindicaciones, las asociaciones vecinales iniciaron una marcha cívica alrededor del Ayuntamiento de Valencia. Después, procedieron a la votación de mociones y propuestas y concluyeron el pleno alternativo con la lectura de un manifiesto en el que exigieron "compromisos serios y menos pérdidas de tiempo", así como "respeto" para ser "ciudadanos de primera" y participar en las acciones del día a día.

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