MADRID, 18 Feb. (EDIZIONES)
Tras once años de empeño, Ryan Reynolds al fin ve hecho "su sueño realidad". Llega a los cines Deadpool, la cinta dirigida por Tim Miller que, tras arrasar en la taquilla estadounidense el pasado fin de semana, se estrena en España este viernes.
En esta entrevista en primicia para Europa Press, Reynolds reconoce que no habría vuelto al género de superhéroes, con el que fracasó encanando a Lintera Verde, el héroe de DC para Warner Bros, si no fuera EN un proyecto totalmente rompedor, algo diferente y singular. Y precisamente eso es Deadpool, el superhéroe más deslenguado y canalla que ha visto el cine, un personaje que rompe con los cánones usuales del género.
"No había ninguna razón para volver a hacer una película de superhéroes a no ser que dejara una huella permanente o fuera algo radical y diferente y eso era Deadpool", afirma Reynolds que recuerda que lelva "once años vinculado" al proyecto. "Once años intentando conseguir que se hiciera y estar aquí ahora demuestra que de vez en cuando los sueños pueden hacerse realidad y que, a largo plazo, compensa", señala.
En cuanto a su personaje, Wade Wilson, un veterano de las fuerzas especiales al que diagnostican un cáncer y cuya única salida para mantenerse con vida es aceptar formar parte de un programa experimental, Reynolds destaca que "Deadpool ocupa un espacio en el mundo del cómic que no podría ocupar ningún otro personaje".
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"CON DEADPOOL TODO ES POSIBLE"
"Ahí está su gran atractivo, todo es posible en Deadpool y eso es alucinante sobre todo en un mundo tan saturado de superhéroes", dice el actor que entre los atributos de su personaje destaca que su gran cualidad es "que sabe que es un superhéroe y que está dentro de una peli basada en un cómic".
Precisamente ese, dice Reynolds, es uno de los elementos más caracteristicos de Deadpool desde su nacimiento hace ya 25 años, que "rompe la cuarta pared y se dirige al público directamente".
Pero en cuanto a su evolución, no es otra cosa que "un mercenario, una especie de mercenario canadiense que enferma de cáncer y luego ingresa el programa Arma-X, el mismo programa que le dio a Lobezno su capacidad de auto-curación". "Así que Deadpool cuenta con la misma habilidad... pero además él es salvajemente sarcástico y recalca todas sus acciones con notas de humor absurdo. Es muy, muy violento pero muy, muy divertido", sentencia.
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A la hora de crear a Deadpool para la película reconoce que "la parte del traje fue la más complicada" para él como actor. "Cogía una cámara y me filmaba a mí mismo con el traje puesto haciendo escenas y hablando para ver cuánto tenía que exagerarlo y nos sorprendimos al descubrir la cantidad de expresividad que transmitían la máscara y el traje, mucho más de lo que nos habíamos imaginado. Así que cambiamos varias escenas en las que me iba a quitar la máscara y las rodamos con la máscara porque funcionaba muy bien", apunta.
