Austral publica la edición 50 de 'Luces de Bohemia', de Valle-Inclán

Europa Press Cultura
Actualizado: miércoles, 31 mayo 2006 17:07

MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -

La colección Austral de Espasa Calpe ha publicado la edición número 50 de 'Luces de Bohemia' de Valle-Inclán, el autor más importante para esta editorial al que, sin embargo, hasta la fecha, aún no se le hecho justicia de manera completa, según señaló Joaquín del Valle-Inclán, nieto del autor gallego y responsable de la introducción y el glosario de la citada edición conmemorativa.

Este experto en la obra de Valle-Inclán aclaró que si bien teatralmente se le ha hecho justicia a su abuelo, no ha ocurrido lo mismo desde el punto de vista de su novela. "'El ruedo ibérico', por ejemplo ha tenido escasas ediciones y lo que queda claro es que nunca tuvo excesivos lectores dado que su novelística es poco conocida", lamentó.

En este sentido, Joaquín del Valle-Inclán añadió que hace 20 años se decía que el teatro de Valle era sólo para leerlo, "una estupidez", hasta que llegó José Tamayo y se atrevió a ponerlo en escena. "Igual que hemos avanzado respecto a esos criterios tan estrechos, confío en que ocurrirá igual con su novela", dijo.

El nieto de Valle-Inclán afirmó que 'Luces de Bohemia' sólo se editó una vez y jamás se representó en vida de su autor. "El devenir de esta obra fue desastroso puesto que cayó en el olvido hasta que Espasa Calpe la recuperó", señaló. A este respecto recordó una carta escrita por el autor gallego en la que, adelantándose a su tiempo, predecía que ya le llegaría el momento a este texto, como así fue al final.

Asimismo, Joaquín del Valle-Inclán indicó que no hay ningún otro caso en el que las obras completas de un autor se encuentren en una colección económica y de bolsillo, como así ocurre con Austral, gracias a la decisión que tomaron en su día su abuela y su padre de buscar una editorial popular para dar a conocer la obra de Valle.

TERTULIANO Y DE DERECHAS

Respecto a la personalidad de Ramón María del Valle-Inclán, su nieto quiso desmitificar muchas de las opiniones que han circulado en torno al autor. Así explicó que era "mucho más normal" de lo que se cuenta y que vivió toda su vida "haciendo tertulia, lo que indica que era muy sociable".

También quienes le conocieron decían que era muy educado e irónico "aunque su anecdotario, que ha sido nefasto para él, señale lo contrario", dijo. Además fue "muy trabajador, porque tuvo familia numerosa y todos vivían de sus libros, y se preocupó mucho de la educación de sus hijos". Joaquín del Valle-Inclán reconoció que, como la mayoría en aquella época, su abuelo se batió en algunos duelos aunque matizó que en absoluto era el "salvaje" que se le ha achacado.

Ideológicamente fue un carlista declarado hasta la I Guerra Mundial y "desconfiaba de la democracia parlamentaria ya que era partidario del hombre fuerte y providencial". Desde el punto de vista religioso, Valle-Inclán tenía un pensamiento próximo al "catolicismo social". "Nunca estuvo a la izquierda ni hizo declaraciones en esta dirección y aunque es verdad que existían ribetes de justicia social en sus ideas era bastante elitista", agregó.

Joaquín del Valle-Inclán afirmó que a su abuelo "se le lee mal" y recordó que Tirso y Lope, por un lado, y la zarzuela por el otro, fueron "las dos grandes patas" de su obra. "'Luces de Bohemia' habla de muerte y de religión y no es una crítica social, como se ha dicho", apostilló.

UN MILAGRO

El director de escena Lluís Pasqual, que ha montado 'Luces de Bohemia' a lo largo de su carrera, se refirió en esta presentación a que actualmente ocurre "lo contrario" que sucedía cuando el autor vivía. El gusto por Valle-Inclán ha quedado patente en los directores y actores del momento.

"Desde que estrenamos esta obra en París en 1983 con José María Rodero en el papel de Max Estrella, lo que ha pasado con 'Luces de Bohemia' ha sido casi un milagro, un misterio, como ocurre siempre con el buen teatro", señaló recordando que la función hizo una larguísima gira y llegó al María Guerrero donde estuvo un año entero en cartel.

"Esta obra es de una enorme modernidad. A veces parece periodismo y otras veces antiteatro. Parece mentira que, además de ácida y lúcida pueda ser comprensible", admitió. El director de escena aludió a la dificultad que tiene llevar a escena el "tono" de las obras de Valle, "que requiere un actor que se exponga y que esté siempre a punto de hacer el ridículo". También hizo referencia a las populares "acotaciones", "siempre extraordinarias y muy complejas para trasladar a un montaje".

Austral cumplirá el año que viene su 70 aniversario y entre las celebraciones previstas se encuentra el relanzamiento de la obra completa de Valle-Inclán así como algunos retoques a su tradicional diseño, avanzó la editora Nuria Esteban.

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