SEVILLA, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Cajasol, Juan Carlos Ollero, ha asegurado que, para el club de baloncesto sevillano que preside, el año 2010, que llega a su fin, ha sido "excelente", y como tal quiere dedicarlo a la "afición".
Para Ollero, el equipo que preside "no pierde la cara" a los encuentros "nunca", ni siquiera "contra rivales mucho más poderosos", lo que ha proporcionado en el año "momentos de gran satisfacción" a los cajistas.
"El primer semestre se coronó con una buena temporada, y en el segundo mantenemos todas las posibilidades abiertas para hacer una campaña mejor, puesto que hemos conseguido clasificarnos para el 'Last 16' de la 'Eurocup' y mantener en ACB un balance positivo de 7 victorias y 6 derrotas", recordó.
Paralelamente, el presidente del club hispalense destacó que durante el presente año, y de la mano del técnico Joan Plaza, el equipo ha conseguido consolidar un estilo de juego que ha proporcionado estabilidad.
"Hemos creado y mantenido un estilo propio, con carácter, que algunas crónicas califican de aguerrido, y que yo prefiero calificar de profesional, exigente y serio, que sabe dar respuesta a los momentos difíciles e importantes", refirió.
Asimismo, Ollero resaltó el "valor" que tiene esta actitud, ya que así se comienza a ver "desde fuera" que el Cajasol es un club donde los jugadores "saben a qué vienen", y que "van a encontrar un ambiente de exigencia" alto, propicio para "el crecimiento" de "los jóvenes", y en el que deben "enseñar y ser un ejemplo" los veteranos. "Debemos convertir el club en un sitio donde la gente quiera venir para esto", sentenció.
No obstante, el mandatario sevillano admitió una "debilidad" por parte del club, que confía en "resolver el próximo año", en referencia a la cantidad de público que acude al pabellón de San Pablo a seguir a los suyos, una cantidad que puede ser mejorada.
Finalmente, el dirigente quiso destacar el trabajo del entrenador y el equipo técnico, así como recordar que "nada" de lo exaltado "sería posible" sin el apoyo de la entidad bancaria que da nombre al equipo, una base económica, "mayor o menor, pero segura, constante y fiel", concluyó.
