Baloncesto.- Scola no piensa en "renunciar" al Preolímpico de Las Vegas y asegura que "nadie es indispensable"

Actualizado: viernes, 27 abril 2007 18:58

"Vaya quien vaya, tenemos un equipo competitivo igual"

MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -

El ala-pívot argentino del Tau Cerámica, Luis Scola, confesó que en ningún momento pensó en renunciar a jugar con la selección argentina el Preolímpico de Las Vegas, como han hecho compañeros suyos como 'Manu' Ginóbili, Walter Herrmann o Fabricio Oberto.

"La palabra renuncia suena agresiva. Uno puede no ir un año a la selección, a veces con una razón justificada y otras no tanto. Al haber perdido en el Mundial, yo quería ir al Preolímpico. Confieso que la pasé mal en un tramo de Japón porque me alejaba mucho de Tiago (su hijo) por primera vez. Me lo cuestioné. Pero supongo que le pasará a cualquier trabajador cuando tiene un mal día... Al terminar el torneo, volví convencido de ir", señaló.

El capitán del cuadro vitoriano, por otro lado, aseguró que en ningún momento ha tenido la presión de su club, como ha pasado con varios equipos de la NBA, que no están de acuerdo con dejar a sus jugadores el ir con sus respectivos combinados nacionales.

"En el Tau Cerámica nunca me pasó eso y no pensé qué pasaría si me piden que no vaya", afirmó en una entrevista al diario 'Olé', que recoge Europa Press.

Sin embargo, Scola reconoció que en el Preolímpico echará de menos a Oberto. "Me gustaría que jueguen los mejores. Además de buena calidad humana en el grupo, existe gran calidad técnica. Pero vaya quien vaya, tenemos un equipo competitivo igual", advirtió, ya que Argentina, vigente campeona olímpica, busca su billete para estar presente en Pekín 2008.

Lo que sí tiene claro es que hay jugadores suficientes para lograr ese objetivo. "En la actualidad, nadie es indispensable en un equipo. Ningún jugador de ningún equipo", afirmó, señalando que no cree que en la albiceleste "haya un líder claro".

Scola no dudó en reconocer que para él es "especial" jugar con Argentina. "Me gusta jugar con Argentina y por eso voy. Si no, no iría. Llevo ocho años seguidos y viví momentos mejores y peores, pero ganas de estar tengo y tuve siempre. Es un momento especial para los jugadores porque en este torneo se juega por la camiseta", afirmó.

"Los que estamos en Europa tenemos la oportunidad de representar a nuestro país y darles una alegría a nuestra familia, amigos y a la gente. En España es muy difícil que te vean y, en la selección, mi papá o mi mamá pueden disfrutar de un partido mío. Además, la gente lo vive de otra manera y eso te motiva", concluyó.