BARCELONA/MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Winterthur FC Barcelona y el Real Madrid afrontan a partir de hoy (20:45 horas/Palau Blaugrana) su particular semana de pasión, y decisiva para el futuro de ambos equipos esta temporada, con el billete para la 'Final Four' de Praga en juego en la Euroliga y un duelo de por medio en la ACB, el próximo domingo en el Palau. Por su parte, el Tau se enfrenta al Panathinaikos griego, el rival que los baskonista querían evitar a toda costa.
El Madrid y el Barcelona podrían verse las caras hasta en cuatro ocasiones, si se llega al tercer encuentro en un 'play-off' de cuartos de final de Euroliga cuyo primer asalto tendrá lugar hoy, en apenas siete días, en unos duelos que podría abrir muchas heridas en uno u otro para lo que resta de campaña.
Maestro, Boza Maljkovic, y alumno aventajado, Dusko Ivanovic, volverán a medirse con un gran premio en juego, como es el disputar una 'Final Four' de la máxima competición europea, algo que ambos ya saben lo que es, aunque solamente el madridista la ha ganado, hasta con tres equipos diferentes (Jugoplastika, Limoges y Panathinaikos).
Hasta el balance en los enfrentamientos de esta temporada está igualado (1-1), con una victoria para los azulgrana, en Liga en Vistalegre, y otra para los blancos, en los cuartos de la Copa del Rey, en una clara muestra de lo equilibrado del choque, con el factor cancha como único punto que hace girar la balanza hacia el Barcelona.
El equipo catalán afronta esta primera cita después de hacerse con el liderato en solitario en la ACB gracias a su triunfo ante el Etosa Alicante (82-76), aunque Ivanovic ha admitido su preocupación porque no cree que el juego ofrecido sea suficiente para imponerse al Madrid, un rival al que tiene especiales ganas por los precedentes.
En la Copa del Rey esta temporada con el Barcelona y, sobre todo, en la final de la ACB del año pasado con el Tau de Vitoria, los recuerdos de sus choques más recientes contra los blancos no son buenos para Ivanovic, aunque los azulgrana vencieron en feudo madridista en el partido de la actual campaña en la ACB (72-73).
Ahora, se encuentran en la Euroliga y el Barcelona cuenta con todos sus hombres. No faltará, en principio, Juan Carlos Navarro, aunque no al cien por cien, debido al esguince de tobillo que sufrió el pasado jueves en la última jornada del Top-16, ante el Unicaja (60-73), que supuso la única derrota del Barça en la segunda fase.
Además de Navarro, el líder del equipo, que acostumbra a brillar en las grandes ocasiones aunque arrastre problemas físicos, también estará disponible el italiano Gianluca Basile, una vez superada la elongación muscular que se produjo hace dos semanas y que reapareció en el partido con el Etosa, ante el que jugó casi 18 minutos.
EL MADRID, A RECUPERAR EL FACTOR CANCHA
Mientras, el Real Madrid, a pesar de que el factor cancha está en su contra, confía en sus opciones para regresar a una final de la máxima competición, algo que no hace desde 1995 cuando de la mano del 'Zar' Sabonis levantó su octava y última Copa de Europa.
Los blancos se agarran para ello a lo que fue el último cara a cara entre ambos y a su mejoría en el último mes, cuya mejor rostro además ha hecho acto de presencia en Europa. El triunfo en la Copa de Madrid en febrero les demostró que pueden ganar al líder de la ACB.
Los de Maljkovic llegan, eso sí, heridos en su orgullo tras ver como se les iba en el último cuarto un partido ante el otro superviviente español en la Euroliga, el Tau, que se imponía en Vistalegre (62-73).
Una vez más sus posibilidades de salir victoriosos del Palau pasarán por las manos de Louis Bullock, algo apagado ayer ante los vitorianos, y el serbio Igor Rakocevic, así como la brega dentro de la pintura de Felipe Reyes y Venson Hamilton ante las 'torres' azulgranas.
EL TAU INICIA EL CAMINO HACIA PRAGA
El calendario competitivo no concede ni un respiro al Tau Cerámica, que tras medirse el domingo al Real Madrid en Liga ACB, inicia hoy los cuartos de final de la Euroliga en la cancha (pabellón OAKA, 19:45 horas) del potente y temido Panathinaikos griego.
El Panathinaikos, líder indiscutible de la liga griega, es uno de los mejores equipos del continente y candidato al título de la Euroliga. Cuenta con una plantilla extraordinaria, además de interminable, sobre todo en lo que se refiere a su juego exterior.
El 0-3 de arranque en el 'Top-16' pareció despedir a los de Zeljko Obradovic del título. Cibona, Efes Pilsen y Benetton Treviso dejaron al Panathinaikos contra las cuerdas, pero el conjunto griego obró la recuperación. Ganó primero al Cibona, luego se impuso con autoridad en Estambul y sentenció el día clave contra el Benetton. Entre medias, se adjudicó el título de Copa griega con el Maroussi como víctima.
En su persecución del cetro europeo, el Panathinaikos parte con el factor cancha a favor en la eliminatoria que comienza mañana, al mejor de tres partidos (4, 6 y 13 de abril). Así, el pabellón OAKA será una de las claves de este 'play-off'. Lleno hasta la bandera (20.000 espectadores) y con un ambiente infernal para recibir al Tau Cerámica, será una prueba que los vitorianos tendrán que superar mañana si quieren alcanzar la 'Final Four'.
Por todo ello, el Tau parte con desventaja en las apuestas. No obstante, el haber doblegado al Real Madrid en su propia cancha con un trabajado triunfo (62-73) en el que brilló Luis Scola (25 puntos), supone un espaldarazo anímico importante para afrontar el duelo de mañana. Además, el tener el partido de vuelta en Vitoria y el hecho de haber tenido que luchar duramente en el Top-16 para clasificarse pueden ser bazas a favor de los vitorianos.
Velimir Perasovic que tendrá la consabida baja de Drobnjak, deberá esperar hasta mañana para saber si puede contar con el concurso de Serkan Erdogan, que sufrió un esguince leve en su tobillo derecho en los minutos finales del choque de Vistalegre que le obligó a abandonar la cancha.
EL PANATHINAIKOS, CON LA DUDA DE LAKOVIC
En el Panathinaikos, Obradovic espera poder contra con el esloveno Lakovic, que no pudo jugar el sábado contra el Larissa en la Liga griega debido a unas molestias físicas después del partido contra el Benetton.
No obstante, su baja no sería problema para el conjunto griego, que cuenta con una impresionante línea exterior, con el propio Lakovic y los griegos Dimitris Diamantidis y Vassilis Spanoulis, tres de los mejores del continente en la posición de base-escolta, los tiradores Chatzivrettas y Scepanovic, los sólidos Kalaitzis y Papanikolau y el polivalente capitán Fragiskos Alvertis.
Por dentro, Michael Batiste, bien secundado por Kostas Tsartsaris, el ex ACB Dejan Tomasevic, y el joven Dusan Sakota, completan el poderoso obstáculo que el Tau deberá salvar para estar presente en Praga.
