ORLEANS (FRANCIA), 5 (EUROPA PRESS)
El corredor español José Joaquín Rojas, del Team Movistar, lamentó no haber logrado el triunfo en la segunda etapa de la París-Niza, disputada entre Mantes la Jolie y Orleans sobre 185,5 kilómetros, en la que quedó segundo por detrás "del más fuerte", el belga Tom Boonen (Omega Pharma-Quick Step).
José Joaquín Rojas hizo un balance, no obstante, "súper positivo" tanto para él como para el equipo, ya que, junto a Alejandro Valverde, integrado también en el corte de 21 corredores que se formó por la lluvia y los abanicos, pudo "luchar por la etapa y eliminar a gente para la general".
"La semana pasada estuve muy afectado por un virus que me obligó a retirarme en Almería. Hasta el jueves no pude entrenarme y tenía muchas dudas sobre mi estado. O sea que estoy muy satisfecho hoy. Sabíamos que iba a ser una etapa muy complicada por el viento y la lluvia y hemos tratado de estar lo más cerca posible de Alejandro para protegerle", explicó.
A falta de diez kilómetros para la meta, la diferencia con el pelotón "ya estaba hecha" por lo que dejó de entrar a los relevos "para comer un poco y recuperar de cara al sprint". "Tenía clarísimo que la rueda a seguir era Boonen y a él me he pegado, pero me he descolocado un poco y, aunque al final he empezado a remontarle, él ha sido al final más fuerte", comentó.
Para el campeón de España, en las próximas etapas hay finales "complicados", pero sabe que su trabajo en la carrera francesa es "tratar de ayudar a Valverde" y sólo buscar sus opciones "si las circunstancias de carrera, como hoy, son favorables". "Va a ser una carrera por eliminación, hoy ha caído ya bastante gente, y de momento Alejandro mantiene todas sus opciones", manifestó.