BARCELONA, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los cocineros Javier y Sergio Torres, los gemelos más reconocidos como 'Hermanos Torres' y que cuentan con tres estrellas Michelin en su restaurante Cocina Hermanos Torres, dejarán de lado unos días los fogones para subirse a las biciletas y participar en la Skoda Titan Desert Marruecos 2023, del 2 al 6 de mayo.
Los Hermanos Torres participarán en una de las pruebas de bicicleta de montaña más duras, en la categoría eBike en el equipo KH-7 y con Melcior Mauri como capitán, además de los exciclistas Abraham Olano, Josep Betalú y Sylvain Chavanel y el chocolatero Lluc Crusellas como compañeros de equipo.
"Nuestra relación con el ciclismo viene desde que tenemos uso de razón. En casa siempre ha habido bicicletas. Ahora es parte de nuestra vida. Vamos de casa al restaurante en bicicleta", comentó Sergio Torres. "Entre venir a trabajar y volver por la tarde a casa, hacemos unos 45 o 50 kilómetros. Es una forma de aprovechar el tiempo para hacer deporte", añadió su hermano Javier.
Esta afición por el ciclismo les llevará a vivir una experiencia deportiva única en la Skoda Titan Desert Morocco. "Estamos vinculados con ciclistas que siempre nos han hablado de la Titan, pero ha sido Melcior y KH-7 quienes nos han empujado a hacer algo que ya teníamos en la cabeza y que nos hacía ilusión desde hace años", aseguró Javier.
Ambos formarán parte del equipo más numeroso en el desierto. Un equipo en el que profesionales y ciclistas amateurs conviven para cumplir cada uno su propio objetivo. Unos ganar la carrera, otros poder estar entre los cien mejores y otros disfrutar de la aventura y vivir una experiencia 'titán' en el desierto de Marruecos.
Participarán en la categoría 'eBike Titan', que forma parte del programa oficial de la carrera. Serán tres etapas --3, 4 y 5 de mayo--, siendo la primera de 78 kilómetros por las dunas de Erg Chebbi.
En la segunda etapa recorrerán 72 kilómetros en bucle, con la gran etapa del desierto que empieza y acaba en Merzouga y que visita el lasto oeste del Erg y pasa por el Oasis Tasarmine.
El último día deberán superar metros de desnivel y pistas pedregosas, un recorrido más lento que los anteriores, para llegar al gran arco de meta de Maadid.
