MADRID, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
Dietrich Mateschitz, dueño del equipo Red Bull, insistió una vez más que Mark Webber y Sebastian Vettel, han sido y serán siendo tratados de igual manera por el equipo, aunque esta política pueda costarles el título de pilotos.
Tras ser acusados de tener favoritismos durante el Gran Premio de Gran Bretaña, la escudería austriaca ha intentado calmar la situación durante la última semana. El primero en hacerlo fue Mark Webber, que tras hablar con el director del equipo Christian Horner, aceptó haber hablado de más en público sobre su frustración, y aseguró que es el momento de olvidar el tema.
Esta vez ha sido el dueño del equipo, Dietrich Mateschitz, el que ha hablado por primera vez tras la carrera en Silverstone. Al ser cuestionado por el periódico austriaco 'Kleine Zeitung' sobre el no tener un piloto número uno, Mateschitz ha advertido que "esta filosofía" no es acorde a su "forma de entender las carreras".
"No puedes programar un campeón. Nuestros dos pilotos saben que tienen que vencerse primero uno al otro, pero aun así, se necesitan para conseguir la mayor cantidad de puntos posibles en la competición", afirma el dueño de Red Bull, que recalca que el equipo no debe interferir en la rivalidad de los pilotos, declarando que la situación de los alerones en Silverstone fue "algo único".
"Si me preguntas quien será campeón, diré que uno de nuestros pilotos, pero lo que pase en los 'boxes' no debe interferir, porque entonces comienzan los problemas", advierte, refiriéndose al incidente en Silverstone donde el único alerón delantero nuevo del equipo fue tomado del coche de Webber para colocarlo en el de Vettel.
Por ello, Mateschitz insiste en que no cuenta con "un piloto número uno y otro número dos" y que "ambos coches son exactamente iguales". "El problema en Silverstone fue la primera excepción", aclara Mateschitz, que no cree que esto dañe sus posibilidades de conseguir el título mundial.
Tras ganar la carrera de Silverstone, Webber dijo irónicamente en la radio del equipo 'Nada mal para un número dos', mientras que Vettel concluía séptimo. Por este comentario, el australiano no tendrá sanción, y aunque en Red Bull se consideró "innecesario", Mateschitz opina que no es bueno silenciar a los pilotos. "Ese no es nuestro estilo. Todos pueden decir la verdad, que es una de la grandes virtudes de Red Bull", sentencia.
