SHAKIR (BAHREIN), 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
El piloto español Fernando Alonso apuntó nada más concluir el Gran Premio de Bahrein de Fórmula 1 que la quinta posición de hoy le deja "un sabor agridulce, puesto que el objetivo aquí era subir al podio", pese a lo cual valoró positivamente "llegar un año más a Barcelona como líder".
En este sentido, el piloto asturiano reconoció el "sabor amargo que siempre queda por no subir al podio, más aquí que era el objetivo primordial". Sin embargo, el de la escudería británica cambió el discurso al hacer balance de este comienzo de Mundial: "Estoy satisfecho con este este primer ciclo de tres carreras. Honestamente, quién pensaba que pudiera coliderar el Mundial y estar a la altura de los Ferrari, que todo el mundo pensaba que estaban a años luz de nosotros".
Sobre la película de la carrera, el de McLaren-Mercedes defendió su apuesta nada más ponerse los semáforos en verde: "Intenté arriesgar en la salida, pero la primera curva era muy cerrada y me topé con Hamilton. No hubo espacio para los dos y tuve que esperar hasta la tercera para pasar a Raikkonen".
En este sentido, Alonso dejó claro que no se sintió "nada cómodo durante la carrera". "Hemos terminado la carrera y sumado cuatro puntos más. Estoy contento por ello, sobre todo, después de los problemas de agarre que hemos sufrido toda la carrera. Notaba que el coche se iba para adelante y atrás", explicó.
El piloto asturiano, que insistió en que hizo "todo lo posible sobre la pista", argumentó su elección de neumáticos blandos al igual que eligieron el resto de las escuderías: "Hemos apostado por compuestos blandos por las condiciones de la pista. Sólo en las vueltas finales, cuando la pista mejoró, salieron las 'gomas' más duras a pista", concluyó.
