BARCELONA, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Barça Femení afronta el Clásico de la Liga F Moeve de este sábado (16.00 horas, Estadi Olímpic Lluís Companys) con la posibilidad de ampliar a siete puntos su ventaja sobre el Real Madrid, segundo en la tabla, y con el recuerdo aún reciente de la derrota (1-3) del curso pasado en el mismo estadio, la única encajada ante el conjunto blanco en partido oficial.
"Creo que ese partido se decantó por una decisión arbitral que podía haber cambiado todo", recordó la delantera Clàudia Pina, que aseguró que el equipo llega "con ganas de hacerlo mejor" y de "dominar con balón". "Estos partidos se preparan solos, son diferentes, de los que nos gusta jugar", añadió la jugadora catalana en el 'Media Day' organizado por el club, confiada en que el equipo saldrá "con otra cara" este sábado.
"Aunque no fue nuestro mejor partido, somos conscientes, salimos mal de ese partido con ganas de seguir mejorando y esperemos que el sábado el equipo salga de otra manera, domine con el balón y hacer nuestro partido", comentó sobre qué deben cambiar de cara a este nuevo Clásico para evitar una segunda derrota.
Por su parte, la capitana Irene Paredes reconoció que la derrota del año pasado hizo "bastante daño" por la manera en la que se perdió. "Tenemos una nueva oportunidad, estamos fuertes y convencidas. Queremos demostrar que fue un tropezón y ponernos a siete puntos. Confiamos muchísimo en nuestro equipo; creo que tenemos las mejores jugadoras del mundo", subrayó la defensa vasca.
También Caroline Graham Hansen destacó la motivación que genera el duelo. "Siempre hay ganas de jugar contra el Real Madrid porque es nuestro gran rival. El del año pasado no fue nuestro mejor partido, pero cuando pierdes, te duele más y quieres ganar esta vez", apuntó. La atacante noruega advirtió, no obstante, que el conjunto blanco "tiene mucha calidad" y que el Barça deberá estar "a su nivel top" para superarlo.
QUIEREN UN LLENO EN MONTJUÏC
Las jugadoras también se mostraron ilusionadas por disputar el encuentro en el Estadi Olímpic Lluís Companys, un escenario que permitirá acercar el equipo a una afición más amplia. "Jugar en el Estadi Olímpic es mejor porque habrá más gente y todos los 'culers' que quieran acercarse nos darán ese empujón. Cuanta más gente venga, mejor; nosotras lo daremos todo en el campo", aseguró Pina.
Paredes, que recordó que el Johan Cruyff "siempre se llena" en estos duelos con su tope de 6.000 espectadores, valoró el traslado a Montjuïc como "una señal de que hay un partido grande". "Si en Montjuïc hay 20.000 personas, bienvenidas sean. Nosotras a jugar, que es lo que se nos da bien, y ojalá podamos darle una alegría a toda la gente que venga", añadió la capitana.
En la misma línea, Graham Hansen lamentó que el Clásico aún no haya tenido la repercusión que merece. "Prefiero jugar con la máxima gente posible; no sé por qué no ha llegado el mensaje de que jugamos contra el Madrid. Puede ser un tema de marketing, pero estamos contentísimas por la gente que viene. Es un día bonito, sábado a las 16.00 horas, y es mejor jugar con 20.000 que con 5.000", afirmó la internacional noruega.