MADRID 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El defensa del Sevilla Juan Cala reconoció este jueves que su situación personal es "jodida" después de apenas contar para el técnico Unai Emery y verse relegado a "un papel secundario", dejando claro que le gustaría poder verse con continuidad en su posición "natural" para demostrar sus cualidades.
"Si dijera que me encuentro bien sería mentir. Mi situación personal es jodida, no estoy contento para nada con el papel secundario que estoy llevando. Partiendo de esa base, no me queda otra que cuando el míster crea oportuno estar para jugar, pero yo no me considero peor que los que están jugando", comentó Cala en declaraciones recogidas por la web sevillista.
De todos modos, el andaluz tiene claro que Unai Emery "piensa de otra forma", por lo que no le queda otra que "trabajar". "A lo largo de mi carrera he tenido que superar obstáculos y éste quizá sea de los más grandes que me estoy encontrando, pero yo no tengo duda que lo voy a superar y que acabaré jugando en el Sevilla", apuntó, sabedor de que si la situación continúa tendrá que buscar "una solución".
Cala lamentó que el técnico vasco esté decidiendo "poner a un lateral izquierdo" en su posición antes que a él, y que apenas haya podido "demostrar mucho" durante esta campaña. "A mí me gustaría ver a Cala tres partidos seguidos en su posición natural, a ver si mejora. El año pasado los tuve y mejoré, cuando debuté igual", recordó, que cree que con "minutos" puede rendir, pero que aclara que después de estar tanto tiempo sin jugar "puedes hacerlo igual de bien".
Por otro lado, sobre los objetivos del equipo, el de Lebrija aseguró que "no queda otra que trabajar" para alcanzar la clasificación para jugar en Europa el año que viene, algo que ve "viable" y para lo que pide ir "poco a poco". "El vestuario es joven y tiene ganas, ha demostrado a lo largo de la temporada que le ha podido ganar a cualquier equipo, pero es verdad que ha perdido partidos que no deberíamos", indicó al respecto.
En cambio, el equipo deberá mejorar a domicilio, ya que no gana desde el pasado mes de septiembre. "No tenemos ninguna excusa para no dar el mismo nivel en el Sánchez Pizjuán que fuera. Hay unas connotaciones de jugar en casa o fuera, pero ponerle una justificación sería una huida hacia delante. Yo creo que más en el trabajo, en ese defecto que tenemos arreglarlo, pulirlo y el próximo partido fuera ganarlo", advirtió.
"Ahora tenemos un partido en casa y tenemos que ganar en casa porque si no se nos acaba el invento. El Athletic es un gran equipo que vendrá a quitarnos los tres puntos y si llegamos al campo del Betis con dos partidos perdidos se te ponen las cosas muy complicadas", confesó.