EUROPA PRESS/PP DE MADRID
MADRID 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha pedido este miércoles a los grupos independentistas vascos y catalanes que quieren 'reventar' el partido de la Copa del Rey de fútbol, que se disputa en el Vicente Calderón y que medirá a Athletic de Bilbao y FC Barcelona, que "reflexionen y recapaciten" porque "si intentan algún tipo de acción se van a encontrar con la Ley".
Tras la presentación de un seminario sobre 'okupaciones' en la Academia de la Policía Local de la Comunidad de Madrid, Cifuentes ha manifestado que aunque "todavía queda" para que se celebre este partido, "si se produjera una circunstancia de esas características, lo que hará la Policía es aplicar la Ley y tomar las acciones que hagan falta para mantener el orden público y la legalidad". "Se aplicarían las sanciones que correspondieran y se llevarían a cabo todas las actuaciones para salvaguardar el orden público", ha reiterado.
La delegada ha señalado que el encuentro, que enfrentará al Barcelona y al Athletic de Bilbao está catalogado "de alto riesgo", por lo que "habrá un operativo policial adecuado para evitar que un acontecimiento deportivo, que tiene que ser un motivo festivo, se convierta en una reivindicación de otro tipo y se puedan producir situaciones que puedan poner en peligro la seguridad y el orden público".
"Al final, lo que importa es salvaguardar el orden público. Me da igual que una actuación que contravenga la Ley venga de un lado o de otro, o esté provocada por unas motivaciones u otras. Parece ser que en ese caso, según han anunciado, el fútbol va unido a la política y espero que quienes lo hayan organizado reflexionen y recapaciten porque si intentan algún tipo de acción se van a encontrar con la Ley", ha agregado.
Esa solicitud ha entrado en la Delegación, pero en Madrid hay que valorar diariamente entre 20 a 30 concentraciones y manifestaciones diarias. Esto está planteado para la Semana Santa y no hemos entrado a valorarlo y estamos ahora en las manifestaciones previas de esta semana y de la semana que viene.
PROTESTAS Y MANIFESTACIONES
Según ha informado ABC Punto Radio, las organizaciones Catalunya Acción, que aspira a conseguir la independencia de Cataluña en 2014, y Esait, que busca el reconocimiento internaciona de la selección autonómica vasca, son las que, según ha informado la cadena de radio, están detrás de la convocatoria, cuyo objetivo es utilizar la final de la Copa como altavoz de sus reivindicaciones.
De esta forma, su propósito es aprovechar el desplazamiento a la capital de decenas de miles de aficionados de los dos clubes finalistas para desarrollar "la mayor manifestación antiespañola de toda la Historia de Madrid" y llevar sus proclamas a las calles de la ciudad por primera vez.
Así, su intención es convertir los alrededores del estadio Vicente Calderón, donde tendrá lugar el encuentro, en una protesta para reivindicar, entre otras cosas, la oficialidad de las selecciones autonómicas de Cataluña y el País Vasco, y una vez en dentro del estadio, acompañar con gritos y y proclamas todo el partido.
DARLE LA ESPALDA AL REY
Además, en el momento de la llegada del Rey al palco de autoridades, pretenden que las aficiones de ambos equipos silben y den la espalda al monarca, al estilo de lo que ya hicieron en la final de la Copa del Rey en 2009 que enfrentó a los mismo equipos en el estadio Mestalla de Valencia.
"La pitada va a ser mayúscula porque se va a fomentar con semanas de antelación, mientras que la otra se promovió con sólo tres días de antelación", ha asegurado en declaraciones a ABC Punto Radio, recogidas por Europa Press, una de las personas que está promoviendo estos actos, también involucrada en la organización de la pitada al Rey en el Mestalla.
Desde las organizaciones, aseguran asimismo que se trata de una convocatoria "absolutamente pacífica" que solo quiere poner de manifiesto "el sentimiento por la independencia y el clima antimonárquico surgido a raíz del caso Urdangarín".
Sin embargo, fuentes policiales consultadas por la emisora se han mostrado preocupadas por la posibilidad de que se produzcan actos violentos, inquietud que se manifiesta mayor en el caso de los independentistas vascos que en el de los catalanes. Asimismo, temen que se convoque alguna contramanifestación.