SEVILLA, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
Sevilla y Betis dirimirán mañana, en el estadio Sánchez Pizjuán, el último de los partidos de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, en un choque en el que los verdiblancos buscarán la primera gran alegría de la temporada, ante un adversario que, ayudado por su mayor potencial, intentará sentenciar la eliminatoria a las primeras de cambio.
Y es que el gran favorito, sin duda, es el Sevilla, que le saca 20 puntos y 20 goles de diferencias a los heliopolitanos en una Liga en la que, mientras los locales luchan por el título, los verdiblancos acaban de escapar de la zona de descenso. Además, éste será el primero de tres derbis entre ambos conjuntos --dos coperos y uno liguero-- en un apasionante mes de febrero para la Sevilla futbolística.
Sin embargo, no es menos cierto que el Betis llega a esta cita en su mejor momento desde que arrancara la campaña y que tiene en la Copa a su competición por excelencia, de la que se proclamó campeón hace sólo dos años, mientras que para el Sevilla el 'torneo del k.o' parece estar maldito, ya que, año tras año, se traduce en un fracaso, hasta el punto de que el club de Nervión no lo ha ganado en toda su historia.
Claro que, si de estadística se trata, ésta se decanta también del lado sevillista, que ha pasado en cuatro de las seis eliminatorias de Copa jugadas ante el Betis que, igualmente, no gana en el Pizjuán desde hace diez años.
Por si faltara algo de morbo, cabe recordar que el Betis le dio al Sevilla en 2005 un sonado 'centenariazo', con ese mencionado título copero, y la clasificación para la 'Champions',a costa precisamente del propio cuadro sevillista que, ahora, tiene la oportunidad de devolverle la moneda a su adversario, cuando se van a cumplir los cien años de existencia de la institución verdiblanca.
Sea como sea, el técnico blanquirrojo parece decidido a poner en liza su once de gala, para, ayudado por una grada que estará a rebosar, intentar dejar fuera de combate al Betis sin darle posibilidades de levantar el resultado en la vuelta. No obstante, el manchego, en un indicio de lo mucho que sabe que se juega su equipo, ha decidido no dar su lista de convocados hasta mañana mismo, para ocultar pistas al rival.
En cuanto al Betis, la gran incógnita estará en saber si su entrenador, Luis Fernández, alineará, como ya hizo ante el Madrid en octavos de final, un once lleno de reservas y de jugadores procedentes del filial, que juega en Tercera División, como Isidoro y Juande, que brillaron con luz propia en el Bernabéu.